Caracas. ANSA
El acto se realizó en una base área de Barquisimeto, ubicada unos 400 kilómetros al oeste de la capital, con la presencia de representantes consulares y empresas aeronáuticas chinas y ministros de su Gabinete.
Chávez agradeció “a la China socialista por su colaboración, su cooperación”, para la dotación de las aeronaves que, dijo, serán destinadas a defender la “revolución” bolivariana y la soberanía del país.
“Con el favor de Dios, con el apoyo del pueblo y con el esfuerzo unido de todos los soldados de la patria y del pueblo venezolano, esta revolución seguirá su marcha. Y nosotros los soldados de tierra, de agua y de aire, aquí estamos prestos para defender la soberanía de esta tierra sagrada, de este pueblo y de esta gran revolución”, afirmó.
Los aviones, que tienen una autonomía de vuelo de 3 a 5 horas, estarán armados con cohetes de 57 milímetros, dos lanzacohetes, con una distancia máxima de 8 000 pies, un antitan-
que y bombas de 30 kilos cada una, entre otros dispositivos, según explicó el jefe del programa K-8W, coronel Alejandro González.