El Mercurio, GDA
El influyente diario español El País publicó en su edición dominical una entrevista a la presidenta chilena Michelle Bachelet, en la que vertió desconocidas impresiones de su mandato.
La publicación comienza con una breve descripción del escenario en América Latina, en donde a diferencia de otros mandatarios, se destaca que Bachelet “no evidencia ningún interés en prolongar su mandato más allá del límite de cuatro años que impone la Constitución”.
80% de chilenos
aprueban la gestión de la Presidenta, a cinco meses de las elecciones.Pero para Bachelet las cosas están claras. “Creo que en la vida como en la política hay que ser ética y estética. Jamás cambiaría yo una situación para beneficio personal”, a pesar de contar con cerca del 80% de popularidad según los últimos sondeos.
“Lo único que quiero hacer en los cinco meses que me quedan es cumplir los compromisos con la gente, porque a eso vine. Algunos dicen que el poder es sexi.
Pero a mí no se me ha generado esa droga. El boato no me impresiona, ni los fuegos artificiales. Lo que sí he visto es que tiene que ver en algunos casos con la ambición personal, que puede ser ambición de fama”, señala.
Y esa ambición, según Bachelet, responde con diferentes estándares dependiendo del género. “He visto habitualmente en el trabajo que en general las mujeres se relacionan con el poder más desde la óptica del servicio a los demás”.
“No quiero caricaturizar, pero parece ser que en el caso del hombre se ofrece una suerte de atracción fatal más potente por el poder. Se produce una atracción por el poder que vive de manera diferente de una mujer. No estoy hablando de presidentes de la República. Lo he visto en jefaturas diversas, ministerios, muchos sitios: hay gente encantadora, que cuando llegan a un cierto cargo se transforman en pequeños dictadores. Algo les pasa con las alturas. Llegan y se marean”, continúa.
Además, Bachelet destacó que Chile ha sabido limar viejas asperezas en los debates políticos de la sociedad. “Hemos avanzado mucho en el reencuentro entre esos dos Chiles. El entendimiento llega a través del diálogo o, cuando el diálogo no es posible, a través de mecanismos democráticos y pacíficos que tenemos para resolver nuestras diferencias. Siempre he sido una persona que ha buscado el diálogo, los puntos en común. Desde chica, incluso”, asegura.
El rotativo español alaba que “la socialista Bachelet no ha sucumbido a la droga del poder. Es simpática y humilde, vivaz y pensativa, cualidades que detectan en ella la gran mayoría de chilenos, razón por la cual han adoptado a su primera Presidenta de la historia como la primera madre de la nación”.
Precisamente esa condición de mujer también le ha traído consecuencias directas en su labor, sostiene Bachelet. Al ser preguntada sobre los dichos de Hillary Clinton, quien asegura que el poder en una mujer es peligroso porque “la gente se fija menos en lo que dice que en ropa y en su pelo”, Bachelet se mostró consciente de las diferencias y aseguró que “yo podría contar millones de anécdotas de este tipo”.