20 hombres hicieron estallar dos blindados

Los guardias recibieron atención tras el asalto al blindado en Lumbaqui (Sucumbíos).

Los guardias recibieron atención tras el asalto al blindado en Lumbaqui (Sucumbíos).

Armados atacaron los autos con explosivos. Intervino las FF.AA. Hay un fallecido. Los billetes volaron y cayeron sobre el asfalto de la carretera luego de que los blindados explotaran a la altura del volcán Reventador, en Sucumbíos.

Allí, cerca de 20 hombres armados asaltaron dos vehículos que transportaban dinero. En el incidente, un guardia falleció y otros dos resultaron heridos.

Este Diario dialogó con el fiscal a cargo de las investigaciones de este caso, Óscar Chasiguasín, quien confirmó que el hecho se reportó a las 10:30 de ayer, 22 de octubre, cuando los blindados circulaban juntos por la carretera.

A esa hora, una volqueta interceptó el paso de los vehículos que transportaban el dinero. Segundos después, otro vehículo similar los chocó en la parte posterior y cerca de 20 hombres salieron de los matorrales con armas de fuego para arrebatarles los montos.

El guardia murió tras recibir disparos. Luego, los desconocidos colocaron explosivos en los blindados para que estos exploten y saquen los billetes. En menos de 10 minutos, los armados huyeron de ese sitio.

Este hecho causó alarma en la Policía y en las Fuerzas Armadas que trabajaron juntos en un operativo para detener a los sospechosos. El Comando Conjunto de las FF.AA. informó que soldados del Comando Operacional ‘Norte’ y un helicóptero militar apoyaron en la persecución y captura de dos personas que presuntamente participaron en el asalto.

Los militares intervinieron con uno de sus helicópteros para apresar a la banda delictiva tras un asalto de esa magnitud. Los soldados confirmaron que en poder de los detenidos se encontraron dos fusiles FAL, un fusil AK ruso, una ametralladora, una alimentadora, 300 cartuchos calibre 7,62 milímetros, tres cargas explosivas...

En Quito también se encendieron las alertas por este incidente y un equipo de policías de la Unidad de Inteligencia Anti Delincuencial (UIAD) se trasladó a la zona del asalto para conocer cómo se había dado.

La razón: recoger evidencias e iniciar las investigaciones.
No es la primera vez que un blindado explota en un asalto.
De hecho, el 20 de noviembre del 2008, uno fue dinamitado a la altura de la Virgen de Papallacta y supuestamente se quemó USD 1 millón. El vehículo atacado ese día pertenecía a la misma empresa cuyos automotores fueron asaltados ayer.
El ataque de ese entonces se produjo a las 03:47 y no se reportaron personas heridas o muertes. El auto fue abandonado en llamas junto a la carretera.

Ayer, EL COMERCIO habló con agentes de Inteligencia quienes coinciden que las bandas dedicadas a los asaltos a blindados operan de la misma forma en el país: atacan en varias ciudades y no se quedan en un solo punto para despistar a los investigadores. Para esas operaciones utilizan armas de alto calibre e intimidan a los celadores durante los atracos.

Así ocurrió cuando los uniformados desarticularon, en abril de este año, una organización dedicada al robo de blindados. El operativo denominado Quimera se realizó en Manta, Portoviejo y Daule. Los gendarmes decomisaron fusiles, carabinas, pistolas, revólveres, una escopeta, una granada, chalecos antibalas, cartuchos. 10 personas fueron apresadas para indagaciones.

En la tarde, el ministro del Interior, José Serrano, sostuvo que uno de los apresados, Gilberto A., era el líder. “(La banda) operaba en todo el país, causante de todos los asaltos a empresas” que trasladan dinero en automotores.

La Policía investiga si los inculpados de ese caso tienen vínculos con hechos delictivos registrados el año pasado. Uno de ellos se reportó el 30 de abril del 2013. Ese día, los guardias de seguridad de un blindado fueron interceptados por 4 hombres que se movilizaban en dos motos, en Manta. Los desconocidos amedrentaron con armas a los celadores y les quitaron un maletín con dinero.

Las llamas cubrían las latas retorcidas de los vehículos y los billetes volaron luego de las explosiones. El humo envolvía los automotores cuando los dos guardias sobrevivientes salieron de estos tras el ataque.

Ellos llevaban puestos cascos y chalecos antibalas. Estaban sangrando cuando se ubicaron junto a la carretera a la espera de los policías y los militares. Un cordón de seguridad se montó en la zona y se prohibió el paso de los automores que circulaban en la zona y de los curiosos que se acercaban.

Chasiguasín confirmó que el resto de la banda se escondió en la selva para evitar ser detenidos por los policías y los militares. Hasta las 22:00 de ayer, los uniformados continuaban buscándolos en la maleza. Los agentes no revelaron el monto del atraco.

Se prevé que la audiencia de flagrancia en contra de los dos detenidos en el operativo de ayer se realice la mañana de hoy en Nueva Loja.

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