Redacción mundo y AFP
Para centenares de niños haitianos, el terremoto que asoló su país el pasado 12 de enero constituye una oportunidad de empezar una nueva vida. Pero en otro país, mucho más desarrollado que el suyo.
La adopción es engorrosa
Al igual que en otros Estados, los procedimientos de adopción incluyen varias etapas y en general son prolongados en Haití. Una vez que la justicia del país de origen pronuncia un fallo favorable, los padres tienen que tramitar un visado y un pasaporte para el niño ante las autoridades consulares de su país.
El lunes pasado, el Comité sobre Derechos de los Niños de las Naciones Unidas advirtió sobre el riesgo de secuestro de niños encubierto por una adopción. El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) también alertó en ese sentido.Luego de que el devastador sismo matara a decenas de miles de personas en la nación más pobre de América, una ola de adopciones de menores se aceleró en Haití. En forma paralela, se facilitaron los engorrosos trámites para que una familia acoja a un menor haitiano.
Francia, EE.UU., España y Holanda, entre otros países ricos, decidieron acelerar los procedimientos de adopción de niños haitianos luego de la catástrofe natural que dejó cientos de miles de desamparados.
El gesto fue saludado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), que respaldó la salida rápida de niños cuyos procedimientos de adopción concluyeron antes de la tragedia, pero advirtió que “precipitarse puede ser perjudicial”. Según la Unicef, el terremoto de Haití afectó al menos a dos millones de menores.
Desde París, el Ministerio de Relaciones Exteriores indicó que “los niños haitianos sobre los que ya hay un fallo judicial de adopción podrán ser trasladados a Francia”, el país que más niños haitianos adopta.
El jefe de la diplomacia francesa, Bernard Kouchner, anunció ante la Asamblea Nacional que “276 niños haitianos en etapa de fallo” judicial serán traídos “lo más rápido posible” .
Kouchner precisó que hay en curso más de 900 procedimientos de adopción de niños originarios de la ex colonia de Francia. En la misma línea, la Presidencia francesa anunció que adoptaría “disposiciones para facilitar el traslado de esos niños”, dadas las circunstancias excepcionales en Haití .
Asimismo, Estados Unidos, que desplegó un impresionante dispositivo militar y humanitario tras el terremoto en Haití, donde casi la mitad de los 9 millones de habitantes son menores, anunció que agilizaría los procedimientos de adopción.
La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, afirmó que su país hará “ todo lo posible” para “encontrar e identificar a los niños” cuya adopción ha sido autorizada y para que “vengan a su nuevo hogar ” . Según el Departamento de Estado, 300 adopciones por parte de familias estadounidenses estaban previstas para 2010.
Holanda envió, el día 21, un avión a Haití para recoger a 106 niños. De ellos, 92 serán adoptados por padres holandeses, informó el Ministerio de Justicia de los Países Bajos en una declaración, mientras que 14 serán adoptados por familias en Luxemburgo. España y Bélgica, con muy bajo número de adopciones en Haití, adoptaron decisiones similares.
La Cancillería española dijo que da “todos los pasos” para que viajen a España los menores haitianos “con procesos de adopción ya concluidos”.