Los habitantes de Naranjal dicen que faltan obras contra las inundaciones

A fines de agosto de 2009, Cruz León mostraba su preocupación ante la llegada del invierno. Este agricultor del recinto Trovador, parroquia San Carlos (Naranjal), en la provincia del Guayas, criticaba la construcción de un muro de contención en el río Cañar.

“Este muro, levantado por Cedege, debería estar mínimo a 2,20 metros, pero está a un metro. Hay informes que dicen que aquí los trabajos finalizaron. Los tubos para las alcantarillas y una maquinaria están botados desde el año pasado”, decía entonces.

Cinco meses después los temores de León se hicieron realidad. Su plantación de cacao, el tendal donde secaba el producto y una parte de su casa, quedaron bajo el agua. Igual ocurrió con un puente de caña que construyó para cruzar el estero Trovador.

El último domingo, la creciente del río Cañar ocasionó que se inunden vastas zonas agrícolas. Como muchas familias del sector, León tuvo que refugiarse por varias horas en Puerto Inca. Los tubos que estaban frente a su casa, en agosto, siguen allí, pero están bajo el agua. No se los utilizó.

Cruz León tiene otro cuestionamiento. En un informe de enero de 2009, el desaparecido Ministerio del Litoral estableció como terminadas las obras del dique en el margen izquierdo del estero Trovador, desde el puente vía Naranjal hasta Las Mercedes, a un costo de USD 315 480 (contratista Egomca). También, el dique del mismo estero, desde Las Mercedes hasta el río Cañar, con una inversión de USD 310 117.

Pero, Vicente Vega, morador del sector, quien vive en la vía a Puerto Inca, dice que no concluyeron las obras. No se instalaron dos compuertas de alcantarillas para controlar el ingreso del agua. Por eso, este invierno él perdió cuatro ha de plátano y otras 18 de cacao.

El recinto Isla Mercedes, también atravesado por el estero Trovador, está afectado. Allí, desde hace un año, hay casas abandonadas por las inundaciones.

Hace cinco meses, el estero estaba seco. Entonces, Sonia Vega se veía preocupada pues no se había colocado una alcantarilla. En el invierno de 2009, el agua alcanzó los 3,20 m. Tras esa emergencia, Corpecuador tenía que elevar un muro. “El contratista hizo una obra a medias. Ahora, el agua ya está metro y medio arriba con las primeras lluvias”. Esto pasó el domingo anterior.

A fines de septiembre, los vecinos de unos 50 recintos y comunas del sector se instalaron en una asamblea en Puerto Inca. Pidieron públicamente al Gobierno Central que cumpla con el dragado del río Cañar.

Para entonces, Emilio Cedeño, representante de los agricultores de Puerto Inca, explicó que luego de varias obras ejecutadas por Cedege faltaba la autorización del Ministerio de Defensa, para que el Cuerpo de Draga de la Marina opere en el río.

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