Guayas se encuentra en alerta ante las intensas lluvias

Daular

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La vía hacia la comuna Daular, de la parroquia Chongón, fue destruida por la crecida del río. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO

Más de un metro de altura. Ese fue el nivel que alcanzó el agua en algunas zonas de la comuna Daular, en la parroquia Chongón (Guayaquil), tras las inundaciones del fin de semana pasado.

Las huellas del incremento del río Daular quedaron marcadas en las paredes de las viviendas de este caserío, ubicado en el kilómetro 33 de la vía a la Costa, donde se construye el nuevo aeropuerto de la ciudad.

Ayer, sus calles estaban cubiertas por lodo, charcos, restos de palizada y basura, que quedaron luego de la crecida del río Daular. “Esta es la segunda inundación que pasamos en una semana”, relata Liliana Castro. “El agua me llegó hasta la barbilla y tuve que pedir ayuda a los vecinos para subir la cama hasta la parte alta de la casa. Los niños estaban asustados, comenzaron a llorar porque el agua los alcanzaba”.

Esta y otras familias fueron rescatadas por agentes del Distrito Progreso y del Grupo de Intervención y Rescate. En un bote llegaron hasta la casa comunal, donde se albergaron temporalmente.

Cuando el agua bajó, Castro regresó a su casa para ver, desconcertada, cómo la fuerza del caudal del río se llevó su mesa de comedor, parte de la ropa de sus pequeños hijos y el nebulizador de su hijo de 3 años, quien padece de asma.

En Daular viven unas 1 500 personas, que en su mayoría se dedican a la agricultura.

Alfonso Martínez perdió sus cultivos de cacao. En su casa apenas alcanzó a construir un altillo para poner a salvo sus pertenencias. “Lo hemos perdido todo. Solo queda sembrar nuevamente, pero es duro comenzar desde cero”, contó, mientras cargaba un cerdo que logró rescatar de su finca.

El intenso temporal también ha causado graves daños en otras zonas de Guayas. En el cantón Durán, dos familias fueron evacuadas por los deslizamientos de tierra en el cerro Las Cabras. Grandes rocas se desprendieron, lo que mantiene en riesgo a 37 familias (165 personas), que construyeron sus viviendas en las laderas.

Los damnificados por las inundaciones del sábado último son atendidos por médicos. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO

En la comuna Puerto Engabao, un río de la localidad arrasó parte de la carretera principal. Eso impide a los pescadores sacar el producto de sus faenas diarias, su principal sustento.

Según el Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno de El Niño (Ciifen), en las últimas semanas se han acentuado rápidamente las condiciones del fenómeno en las costas ecuatorianas.

A fines del marzo, indica en su último boletín, el borde oriental del Pacífico experimentó un acelerado incremento de las anomalías de la temperatura superficial del mar, alcanzando 1,5°C. “Esto invirtió rápidamente el ligero enfriamiento que se había presentado desde inicios del año”.

“A nivel subsuperficial (entre 100 y 200 metros) se aprecia el avance hacia Sudamérica del núcleo cálido con anomalías de hasta 5°C, ascendiendo a niveles superficiales conforme se aproxima a la Costa, eliminando el volumen de aguas frías”.

El Ciifen, además, indicó que la mayoría de los modelos globales sugiere que este calentamiento anómalo de las aguas del Pacífico Ecuatorial Central y Oriental se mantendrá durante el próximo trimestre.

Como precaución, ante los últimos estragos en Guayas, el Comité de Riesgos de la Prefectura local se reunió ayer. Aunque por ahora las autoridades descartan la declaratoria de emergencia provincial, acordaron fortalecer la atención en las zonas afectadas por las inundaciones y el cierre de vías.

Por un lado, enviarán maquinaria a las zonas donde se produzcan cortes de vías o inundaciones, como ocurrió en Daular y Cerecita. Y coordinan ayuda humanitaria con toldos, medicinas, atención médica, fumigación y agua potable para los afectados.

Desde ayer, la Dirección de Salud e Higiene del Municipio de Guayaquil asiste con tres brigadas médicas a los habitantes de Daular. Su director, Ernesto Romero, explicó que han detectado enfermedades como dermatitis e infecciones urinarias, causadas por el estancamiento del agua.

Rosa Baidal Quinde, secretaria de la comuna, espera que la ayuda se mantenga y que se planifiquen obras a futuro para evitar más inundaciones, como el dragado del río Daular. “Este es un asentamiento de más de 100 años. Estamos ubicados en una parte baja, donde el río Daular se une con el estero Salado. Cuando el río se llena, todo se llena”.

En contexto

Marzo fue el mes que registró la mayor cantidad de lluvias del invierno, que no se presentaron durante enero y febrero, cuando se inicia la temporada. Esmeraldas, El Oro, Guayas, Los Ríos y Santo Domingo han sido las más afectadas por los desbordamientos de ríos.

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