Redacción Guayaquil
La instalación de una inspectoría de trabajo para Servicios Domésticos, en la Subsecretaría del ramo, permite que las empleadas tengan un sitio para reclamar y presentar denuncias en Guayaquil. Katerine Maridueña, inspectora del Trabajo, contó que cada día se reciben más denuncias por despidos sin liquidación.
Hasta esas oficinas acuden empleadas y empleadores en busca de explicaciones y recomendaciones. Así también, lo hacen para asesorarse con las denuncias que se tramitan.
Muchas empleadas exigen que se pague los USD 240 cada mes, pues existen casos que ganan entre USD 140 y USD 180. Marlene Suscal, de Mocache (Los Ríos), trabaja hace un año en Guayaquil, puertas adentro. Ella gana USD 160 mensuales pero tiene miedo que la despidan porque su jefa no puede cancelar el nuevo sueldo y sus beneficios. “Yo necesito trabajar y prefiero que me sigan pagando lo mismo, antes que me boten. Aquí me dan todo y me tratan bien”, manifestó.
Desde enero de este año, el Gobierno fijó un solo sueldo para todos los trabajadores, incluidas las empleadas domésticas. Según el ministro de Relaciones Laborales, Richard Espinosa, es un pretexto que los empleadores no pueden pagar los USD 240 para seguir explotando y precarizando el trabajo.
“Se va a controlar que se pague lo que dice la Ley y la afiliación al IESS. Se implementará una campaña para que se visiten los domicilios y se verifique que se cumplan las disposiciones que se han determinado”.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos, existen cerca de 850 000 empleadas domésticas en el mercado local. Pero, hasta la fecha, no se registra el número de afiliados al Instituto Ecuatoriano de Seguro Social.
Según las cifras del IESS, a junio de 2009 se registraron más de 1,1 millones de afiliados del sector privado y más de USD 600 000 del sector público. En esta información no se cuantifica el número de empleadas domésticas, pero el Ministerio de Relaciones Laborales espera que las cifras aumenten en lo que va de 2010.
En El Oro aún no existe un departamento exclusivo para atender a las empleadas domésticas. Todos los trámites laborales se realizan en una sola Inspectoría.
Pablo Loayza, Inspector de Trabajo de Machala, sostiene que hasta la fecha se han notificado seis contratos laborales para empleadas domésticas. Son requisitos básicos para su afiliación al Seguro Social. “Aquí llegan los contratos con las copias de cédula de empleadores y empleada. Poco a poco, las personas se acercan a regular su contratación”.
Según Loayza, “todos los trabajadores tienen derecho a reclamar por sus exigencias laborales y también por los beneficios fijados por la Ley. Aquí solo tenemos verificadores”.