En la feria ganadera de Santo Domingo se realiza la comercialización del ganado que fue importado desde Paraguay. Foto: Juan Carlos Pérez/ El Comercio
Cuidadosamente, el ganadero Amed Botero observo las más de 300 reses que se exhiben en los corrales de la Asociación de Ganaderos de Santo Domingo, en el occidente de Ecuador. Se trata de animales de alta genética, traídos de Paraguay a principios de julio.
Este ganado se exhibirá entre el 1 y el 2 de agosto de 2015. El objetivo es que los ganaderos puedan adquirirlo y así lograr un repoblamiento bovino. La organización del programa está a cargo del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca (Magap).
Para Botero, la iniciativa trae varios beneficios. Uno de estos es que este ganado, de razas brangus, braford, brahman y nelore, tiene mayor capacidad de engorde que las reses que se comercializan en la feria ganadera. “Además la carne es de calidad porque la grasa no se acumula en capas sino que circula dentro de la carne y por ello el sabor es más exquisito”.
Margot Hernández, subsecretaria de Ganadería, aseguró que una de las intenciones es que Ecuador se convierta en exportador de carne. Para esto ya se alcanzaron algunas metas como ser declarado un país libre de fiebre aftosa. “Para impulsar la producción primaria se requiere de un trabajo en cadena que empieza con la genética, nutrición y termina con las cadenas de comercialización”.
En la feria ganadera de Santo Domingo se realiza la comercialización del ganado que fue importado desde Paraguay. Foto: Juan Carlos Pérez/ El Comercio
Este año se tiene previsto que se firmen dos convenios para crear empresas públicas de faenamiento que estarán ubicadas en Santo Domingo y el Cuenca (Azuay).
Los ganaderos de Santo Domingo y de varias provincias del país asisten a esta casa abierta en la que también participa el Banco Nacional de Fomento. Ellos otorgarán préstamos a los ganaderos con un plazo de seis años con dos años de gracia a un interés del 10%.
Botero accedió a uno de estos créditos. Él asegura que apenas lleguen los dos toros que compró a su finca deberá aumentar las medidas de seguridad para evitar que le roben el ganado. “Es una inversión para pagar en varios años. Por eso no puedo permitir que me roben porque la idea es reproducir este ganado”.