Y ahí estaba otra vez. Franco De Vita regresó a Madrid el pasado domingo para presentarse ante 4 000 personas y hacer vibrar el Palacio de los Deportes con sus temas de hoy y siempre, en lo que supuso el penúltimo concierto de su gira ‘Simplemente la Verdad’. En ella promueve su más reciente producción que lleva el mismo nombre y 25 años de carrera musical.
Después de poco más de 60 presentaciones Franco llegó a Madrid. Antes había pasado por escenarios de Italia, Portugal, EE.UU. y varias ciudades de América Latina. La expectativa creada por sus presentaciones en Tenerife y Barcelona prometía una velada intensa. Y así fue.
El espectáculo
A las 21:30 las luces pintaron de naranja el escenario y una música instrumental se hacía paso entre la algarabía. Entre el suspenso y las sombras, se empezó a ver la imagen de varios músicos. Un vídeo se proyectaba en la pantalla sobre la tarima y se escucharon latidos de corazón. Se veían imágenes de las ciudades que visitó durante la gira y súbitamente, ataviado con su guitarra y una sonrisa, Franco irrumpía en el escenario.
Simplemente la Verdad, fue el primer tema. Al terminar dijo: “¡Madrid, buenas noches…!” y el público respondió con gritos. Inmediatamente sonó el saxofón y todos sabían lo qué venía: Louis. Durante momentos, el artista tuvo que dejar de cantar impresionado por la respuesta del público. Una botella de agua y a seguir.
Con su tercer tema (Tú de qué vas), ya se había metido a todos en el bolsillo y antes de continuar pidió que encendieran las luces y señaló: “es que quiero pasar lista” y al ver la cantidad de gente, no dudó en decir, “¡gracias por estar aquí y por hacerlo posible… espero que la pasen bien!”.
Y así uno a uno fue hilvanando sus hits de años anteriores con los temas de su nuevo álbum. Hasta que llamó al escenario a la cantante venezolana Georgina, con quien interpretó un tema. Luego llegó BNK, un par de jóvenes cubanos que hicieron gala de sus voces en un tema con mucho ritmo titulado Vuelve negra, para después sentados muy cerca del público junto a De Vita, fusionar sus voces de manera perfecta para acompañar al venezolano en la interpretación de Si la ves, tema que originalmente grabó con el dúo Sin Bandera.
A las 23:45, al final del tema No basta. Se escuchó “Gracias a todos” y los músicos se retiraron, pero el público sabía que el show no podía terminar así. Y pronto Franco y su banda volvieron al escenario para tocar durante 25 minutos más. Traigo una pena fue el tema que sirvió para cerrar la noche y la cantante cubana Lucrecia, lo ayudó a hacerlo de manera insuperable.
Después de 27 canciones el concierto terminó. A la salida un compatriota le decía a su pareja, “faltaron algunas buenas”, a lo que ella respondía: “haber, ¿dime cuál?” y este se quedó callado y pensativo.