La Torre Eiffel, entre otros sitios turísticos de Francia, está abierta al turismo, según anunció el gobierno francés. Foto: Twitter @LaTourEiffel
La Embajada de Francia en Quito informó el lunes, 21 de diciembre de 2015, que las puertas del territorio no están cerradas para el turismo, pero que hay nuevas medidas de seguridad que se deben tomar en cuenta.
Francia decretó el estado de emergencia por tres meses, después de los atentados terroristas ocurridos en París, el pasado 13 de noviembre, en el que murieron 130 personas, desde ahí el ingreso al territorio galo ha sido restringido. El presidente François Hollande decidió establecer controles sistemáticos en los puntos de entrada al territorio nacional, como: pasos por carretera, ferroviarios, marítimos y aeroportuarios.
Según el comunicado, los documentos necesarios para ingresar a Francia como turistas son los mismos que los que se pedían habitualmente. Sin embargo, el tiempo de espera podrá ser mayor en los aeropuertos y en las estaciones que reciben líneas internacionales.
Además, señala que los ciudadanos de países miembros de la Unión Europea necesitan un documento de identidad válido o pasaporte para ingresar a Francia.
Con respecto a los ciudadanos que tenían una visa vigente y que fue expedida antes del restablecimiento de los controles en las fronteras siguen siendo válidos, aclara el comunicado. Y los plazos de expedición de visados siguen siendo los mismos que antes del 13 de noviembre.
Con respecto a las atracciones turísticas y los eventos públicos. La Embajada indica que los centros públicos culturales de París y de todo el territorio están abiertos; en especial los de mayor interés turístico como la Torre Eiffel, el Museo del Louvre, el Palacio de Versalles, Disneyland París, el Grand Palais, entre otras.
Sin embargo, se ha reforzado la seguridad y los controles en las entradas de los grandes monumentos, pero no conlleva esperas de más de 15 minutos adicionales con respecto al tiempo normal, aseguró el comunicado.
Los espectáculos y conciertos programados también se mantienen y las salas permanecen abiertas, bajo reserva de la decisión de los organizadores o de la prefectura. Pero se han reforzado las medidas de seguridad, sobre todo en los controles de acceso y en los filtros en las entradas, para garantizar la seguridad del público, de los artistas y de las obras.
En este país se han sumado militares para reforzar las seguridades en el transporte público y en las cercanías de los recintos abiertos al público.
Asismismo, los representantes del sector turístico han anunciado que van a contratar a personal de seguridad adicional para garantizar la seguridad de los visitantes.