El Fondo de Cesantía del Magisterio Ecuatoriano es el de mayor tamaño en número de participantes y activos. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
El monto de los activos de los fondos privados de jubilación y cesantía que pasaron desde el 2015 a la administración del Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social cayó.
La Asamblea aprobó en noviembre del 2014 la Ley Reformatoria a la Ley de Seguridad Social y a la Ley del Biess que obligó a traspasar esos ahorros privados a la administración del banco de los afiliados.
El principal argumento fue que estos fondos habían recibido aportes públicos.
Estas opciones de ahorro se crearon desde los años 70 y 80 para mejorar la jubilación o cesantía de trabajadores públicos y privados. Se denominan cerrados porque solo pueden conformarlos los empleados de una misma empresa.
A partir del 2015, la entidad financiera asumió la administración de estos activos de manera paulatina y luego de varias auditorías de la Superintendencia de Bancos que determinaron que los fondos que habían recibido recursos estatales. Hasta junio del 2016, el Biess recibió un total de 65 fondos de jubilación y cesantía.
Antes de que se concrete el traspaso, en marzo del 2015, los fondos registraban activos por USD 1 130 millones, según datos de la Superintendencia.
Dos años después, esto es marzo del 2017, los activos cayeron a USD 1 086,3 millones, según el informe BIESS-MM- FCPC-062-2017 al que accedió este Diario.
Esta caída se explica por tres razones. En primer lugar está una disminución en el número de partícipes, que pasaron de 207 041 en marzo del 2015 a 192 310 en junio del 2016.
Esta tendencia se explica en parte porque un número cada vez mayor de socios ha entrado en edad de jubilación y cumple los requisitos para reclamar el beneficio.
Solo durante el primer trimestre de este año se liquidaron prestaciones de jubilación a más de 12 300 partícipes. Con la jubilación, estas personas reciben sus ahorros y dejan de formar parte del fondo.
El segundo factor, según el informe, se relaciona con las desafiliaciones voluntarias.
Víctor Albán, exgerente del Fondo de Jubilación y Cesantía de la Escuela Politécnica del Ejército (Espe), se retiró hace un año del fondo porque a su juicio se estaban administrando mal. Advirtió que a la fecha no terminan de liquidar a los cerca de 600 afiliados que se retiraron del fondo . “Nos deben alrededor de USD 1 millón. Dicen que no hay recursos”.
“El fondo se creó entre un grupo de afiliados que se conocen. Es muy difícil que fuercen a los trabajadores a pertenecer a una institución de la que no tienen control”, comentó Fernando Gándara, exgerente del Fondo de Cesantía de la Función Judicial.
Dijo que en su gestión (2013-2015), la principal inversión de los fondos era en préstamos de los propios afiliados, con rendimientos de 9% anual, y en programas inmobiliarios.
El tercer factor que explica la baja de los activos es que para enero de este año USD 231 millones de exceso de liquidez no estaban siendo invertidos, anota el informe del Biess. El documento no explica por qué no se ha colocado ese saldo.
Para la experta Carmen Corral, la baja de activos tiene que ver con el manejo de las inversiones. “No están invirtiendo los excedentes de los fondos, sino los tienen a disponibilidad”.
Recordó que ahora el Biess da las instrucciones sobre dónde invertir, pero “según las necesidades del Gobierno, y no de los partícipes”.
El informe del Biess destaca que todos los fondos reportan rendimientos sobre sus activos, excepto nueve que registran pérdidas, aunque son leves. También señala que el Biess ha logrado optimizar y reducir los gastos.
Robert Andrade, gerente del Fondo de Cesantía del Magisterio, aseguró que los índices de ese fondo han mejorado. “El año pasado cerramos con una rentabilidad de 7,44%. Para 2015 estaba en 5,5%”.
Andrade aclaró que la caída de los activos de este fondo es producto de que han cancelado más de USD 100 millones en liquidaciones a los partícipes.
Edin Lucero, socio de este fondo, recordó que antes se hacían dos asambleas al año para rendir cuentas, pero que desde hace tres años esto no ocurre.
Según la Superintendencia de Bancos, durante este año dos fondos con aporte estatal se han liquidado, aunque no se explican las razones.
Este Diario solicitó al Biess por correo, el 14 y 28 de noviembre, información sobre los fondos. Se ofreció una entrevista para el 11 de diciembre.
Cronología
Noviembre 2014
El 20 de ese mes se publicó la Ley Reformatoria a la Ley de Seguridad Social y a la Ley del Biess, para la administración de los fondos previsionales con aportes estatales.
Mayo del 2015
La ‘Súper’ de Bancos traslada la administración de los primeros siete fondos al Biess. La medida genera protestas entre partícipes.
Hubo detenidos.
Junio del 2016
La ‘Super’ de Bancos completó el traslado de los fondos privados. Tras concluir las auditorías, 65 fondos previsionales de trabajadores públicos pasaron al Biess.
2017
En este año se han liquidado dos fondos que tienen aporte estatal mediante resolución de la Superintendencia de Bancos, aunque no se especifican los motivos de la decisión.