Redacción Quito
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La ‘oficina’ de Carlos Michelena, en el parque El Ejido, está cerrada. Según el ‘Miche’, uno de los personajes que representan la sal quiteña, está clausurada por el Servicio de Rentas Internas (SRI), por no dar facturas. Aunque en la realidad el parque está en remodelación.
En la presentación de la Chispa y la Sal Quiteña, el lunes en la noche, Eduardo ‘Mosquito’ Mosquera lamentó la inseguridad que vive el país y la ciudad. “Me asaltaron con un cuchillo. Me dijeron: te violamos o la vida. Y aquí me tienen, viviendo”.
Los dos personajes representan esa huella del estilo del humor quiteño. Hablan de la vida cotidiana frente a miles de personas que ríen a pierna suelta con sus bromas. Michelena, por ejemplo, sabe aprovechar su picardía para hablar de política.
A sus 57 años está más que convencido que el sí tiene y se merece un espacio en la política y sobre todo en la Asamblea Nacional. “Porque yo sí soy payaso”.
Fiel a su estilo ya tiene una careta con el modelo del rostro del presidente Rafael Correa. Incluso, con su voz ya imita el mismo tono del “‘Rafa’” y dice que la patria ya es de todos “mis panas”.
En su sátira recrea un diálogo común con un ecuatoriano regresado de España y dice que el ‘Presi’ está manejando al país como su apellido, a correazos. “Joder. Antes, ventajosamente, no se llama Vergara”.
Michelena dejó claro que el no es quiteño de sepa. “Sepa usted que no soy quiteño de sepa. Mi mamá era de Toacazo. Mi papá de Ambato. Se conocieron en la Flota Pelileo. A mí me ensamblaron en la piedra colorada”.
Es oportuno para bromear sobre policías. Un papel que lo interpreta Mosquera convencido de su dinámica para hacer reír. Sus chistes en cadena siempre apuntan a los pastuzos.
Así, contó el diálogo entre dos pastuzos. “Alita, alita. A mi mujer le ha dado por tener relaciones en el asiento trasero del carro”. Vaya, pero qué se siente, responde el amigo. “No sé yo siempre estoy manejando el carro”.
Y suelta una cadena de chistes sobre aquel pastuzo que le mandan al diablo en el trabajo y pide viáticos…
Pero también hay más personajes que intentan rescatar ese toque de humor. Ahí apareció María Beatriz Vergara, en su papel de ‘Mamá quiteña del siglo XXI’.Ella es hábil para contar su experiencia de ser mamá de un niño llamado ‘Pepe’ y estar casada con Óscar Nicolás. Aunque prefiere identificarlo como OSNI.
OSNI es todo un personaje en la interlocución de la artista con el público. “Pero tienen que saber que OSNI también significa objeto sexual no identificado”.
Pero para chistes finos y sutiles están Las Marujitas. Las tres actrices que representan a la típica cuencana, mujer quiteña y a la costeña llevan 20 años contando historias comunes y graciosas.