Plantón por los 13 años del caso González y otros, en los exteriores de una farmacia de la ciudadela La Alborada, al norte de Guayaquil, la mañana de hoy sábado 19 de noviembre. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
Familiares de los tres desaparecidos del caso ‘González y otros’ protagonizaron un plantón frente a una farmacia del norte de Guayaquil, la mañana de hoy sábado 19 de noviembre. La razón: 13 años de la incursión policial en un local comercial de la urbe, donde fallecieron ocho personas.
Amigos y familiares de las víctimas, en compañía de representantes de Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos (CDH), desplegaron fotos de los desaparecidos y pancartas con frases como “Tortura, nunca más”, en una acera frente Albocentro de la ciudadela La Alborada.
“¿Dónde están? Nos faltan tres. No más injusticia, no más impunidad; exigimos verdad y justicia para los desaparecidos”, se podía leer en otra de las pancartas que desplegaron en la acera, como cada 19 de noviembre.
“Soy esposa de Jhonny Gómez, uno de los desaparecidos, al no tener una tumba donde recordarlo, venimos a este lugar donde fue la última vez que se lo vio con vida, venimos a pedir verdad y justicia”, indicó Dolores Guerra, esposa de uno de los tres desaparecidos. “Queremos saber qué hicieron con el cuerpo de Jhonny, independientemente de lo que se diga de él”, dijo.
En estos 13 años, el hijo de Guerra, que tiene el mismo nombre de su padre, pasó de ser un niño de cinco años a un mayor de edad. Fue el mismo joven el que desplegó las pancartas esta mañana, entre ellas una gigantografía con una foto del niño que fue, junto a su padre desaparecido y junto a su madre, con quien reclama ahora justicia.
El pasado 20 de junio de 2016 la Fiscalía anunció el hallazgo con vida en Venezuela del que se contaba como el cuatro detenido y desaparecido del caso, Erwin Vivar.
Guerra le dio crédito al relato de tortura, pero calificó de ‘novelesca’ la versión de Erwin Vivar sobre la presunta ejecución de Johnny Gómez en las aguas del estero Salado y el espectacular escape de Vivar de la custodia policial, en medio de las balas y en el agua, bajo el cuerpo de Gómez.
“La aparición de Vivar nos dejó en un estado emocional terrible, porque él viene con una versión que nos tuvo nueve días buscando en el estero Salado, con la idea de encontrar algo, pero no se encontró nada, no sé hasta donde irá esta tortura”, exclamó Guerra.
El Comité de Derechos Humanos expresó su preocupación por “la precipitada forma en que la Fiscalía anunció el hallazgo con vida de Vivar y la ausencia de protocolos de reserva que hubieran evitado la aguda crisis y vilo que soportaron las familias de los desaparecidos”.
El pasado 11 de noviembre de 2016 se ratificó la sentencia por ocho ejecuciones extrajudiciales, se acusó a 31 personas y se condenó como autores a cinco policías y a un exagente a 16 años de prisión. Pero aún está abierto el proceso por desapariciones forzadas.
El exmayor de policía Eduardo González Flores, que presuntamente dirigió el operativo, continúa prófugo fuera del país “sin que exista evidencia clara de proceso de extradición”, cuestionó el organismo de Derechos Humanos.
Este año se logró la captura de dos agentes acusados, y aún existen otros dos policías prófugos señalados de autores materiales.