En el norte de Quito, un agente pide a los conductores que se retiren porque se estacionaron en un lugar prohibido. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
Son las 18:00 y en la avenida Morán Valverde, en el sur de Quito, tres agentes dirigen el tránsito. Uno de ellos es Carlos López. El uniformado dice que está en ese lugar más de cinco horas y que en ese tiempo ha multado a seis conductores. Sus compañeros también llevan entre cuatro y cinco sanciones.
En una cámara de fotos guardan las evidencias de las faltas.
Ahí se ve a choferes que manejan sin el cinturón de seguridad o se estacionan en lugares prohibidos. Los tres agentes dicen que esas son las faltas más frecuentes en ese sector.
Sin embargo, explican que los tipos de infracciones varían de acuerdo con las zonas. Eso lo corrobora otro agente que vigila en la Simón Bolívar.
Allí, los conductores son multados por exceso de velocidad, por rebasar inadecuadamente y causar accidentes de tránsito. Ese fue el caso de Fernando Villa, un chofer que fue multado hace cinco días en esa avenida, cuando transitaba a más de 100 km/hora, pues lo permitido es 90km/h.
Por eso, le sancionaron con seis puntos menos a la licencia y el pago de una multa equivalente al 30% del salario básico.
El sistema de sanción en las licencias de conducción está vigente desde el 2011. Pero desde el 2012 hasta septiembre del año pasado, 11 358 choferes han perdido los 30 puntos por primera vez, a escala nacional.
La Agencia de Tránsito hizo un estudio de las principales causas por las que se pierde el puntaje e identifica nueve causas usuales. Estas van desde manejar sin cinturón de seguridad hasta no realizar el traspaso de dominio del auto en el tiempo establecido.
En las escuelas de conducción que ofrecen la recuperación del puntaje saben de estas faltas frecuentes. Así lo corrobora Vinicio Manzano, presidente de la asociación nacional, que abarca a 62 escuelas en el país. Él dice que para evitar estos problemas, en la malla curricular se refuerzan principalmente los conocimientos en la Ley de Tránsito.
En cada clase se repasan la norma y las sanciones.
Katherine Argüello tiene 34 años y ya no tiene puntos en su licencia. Ella está en una escuela del norte de Quito. Cada mañana tiene clases de 08:00 a 10:00. El viernes contó que se quedó sin el permiso para manejar luego de cinco sanciones.
Tres fueron por exceder los límites de velocidad y dos por irrespetar a los agentes.
Nelson Delgado, director académico del Sindicato de Choferes de Pichincha, asegura que en las primeras clases lo que hacen es identificar las faltas que más comete el chofer.
Uno por uno cuentan por qué perdieron los puntos. Luego se reúnen en grupos y analizan cómo pudieron evitar las sanciones. Esos talleres sirven para reforzar las lecciones. Pero Delegado indica que en ocasiones los conductores necesitan más de dos cursos.
Ese fue el caso de Rodolfo Valles, un chofer de taxi. Él perdió los puntos de la licencia en dos ocasiones. Dice que las faltas que más le perjudicaron fueron exceso de velocidad, estacionarse en sitios no permitidos y clientes que no usaron el cinturón de seguridad.
Actualmente, los alumnos tienen cuatro oportunidades para recuperar el puntaje. La primera vez obtiene 20, pero la licencia se suspende 60 días.
En cambio, si es reincidente apenas le habilitan 15 y le sancionan con 120 días de prohibición para conducir.
En la tercera y cuarta oportunidades, el conductor podrá recuperar 15 puntos, pero tendrá una suspensión de un año.
Entre el 2013 y septiembre del 2016, 133 choferes perdieron dos veces todos los puntos. Otros 16, en cambio, los hicieron por tres ocasiones y 124 se quedaron sin licencia por agotar todas las oportunidades para recuperarse.
La ANT ha impulsado ferias de seguridad vial en todo el país. De hecho, la semana pasada se dieron talleres y exposiciones en Quito. Allí participaron representantes de las escuelas de conducción, asociaciones de víctimas de accidentes, entre otros. La idea es que los choferes conozcan las consecuencias de infringir la ley.
Entes como Justicia Vial ya han advertido que esas acciones no bastan para evitar que los conductores cometan infracciones. Para Guillermo Abad, presidente de esa agrupación, las autoridades deben rectificar las reglas para entregar licencias. Según él, se debe cambiar la malla curricular de los institutos y aumentar las horas de práctica.