Evo Morales dice que reunión con Chile sobre fronteras será el 25 de julio

Imagen referencial del presidente de Bolivia, Evo Morales, durante un acto en el Palacio de gobierno de La Paz (Bolivia) llevado a cabo el miércoles 28 de junio de 2017. Foto: Martin Alipaz/EFE

Imagen referencial del presidente de Bolivia, Evo Morales, durante un acto en el Palacio de gobierno de La Paz (Bolivia) llevado a cabo el miércoles 28 de junio de 2017. Foto: Martin Alipaz/EFE

Imagen referencial del presidente de Bolivia, Evo Morales, durante un acto en el Palacio de gobierno de La Paz (Bolivia) llevado a cabo el miércoles 28 de junio de 2017. Foto: Martin Alipaz/EFE

El presidente de Bolivia, Evo Morales, confirmó que la reunión con el Ejecutivo chileno sobre los incidentes fronterizos entre ambos países se celebrará el próximo 25 de julio en la ciudad boliviana de Santa Cruz (este).

Morales hizo el anuncio esta noche en una entrevista con el canal privado PAT, en la que también consideró que su homóloga de Chile, Michelle Bachelet, parece "secuestrada" por la "oligarquía chilena".

El gobernante boliviano indicó que ambas Cancillerías acordaron a "último momento" que el encuentro se realice el 25 de julio en la ciudad cruceña, y no el 18 de julio en La Paz, como había planteado inicialmente Bolivia.

El canciller boliviano, Fernando Huanacuni, informó más temprano sobre la invitación al diálogo, en respuesta a la petición de su par chileno, Heraldo Muñoz, de poner "día y hora" para conversar sobre los incidentes fronterizos.

Según Huanacuni, Chile también hizo entrega de una nota invitando a reanudar las reuniones del Comité de Fronteras, creado en 1998, para facilitar la cooperación y el desarrollo fronterizo.

Las invitaciones mutuas se dieron después de que el Gobierno de Morales permitiera el retorno a Chile de dos carabineros que estuvieron detenidos en Bolivia tras pasar ilegalmente la frontera en 7,5 kilómetros.

Los carabineros chilenos volvieron a su país 51 horas después de haber sido detenidos, pese a que su incursión en Bolivia supuso la comisión de al menos cuatro delitos, según el Gobierno de La Paz.
El Ejecutivo de Morales ha destacado el trato dado a este caso, en contraste con lo ocurrido con los siete aduaneros y dos militares bolivianos detenidos en Chile en marzo pasado.

Los nueve funcionarios bolivianos fueron detenidos durante 101 días, juzgados, condenados y expulsados hace casi tres semanas de Chile, a donde tienen prohibido volver durante muchos años.
Las autoridades chilenas consideraron que los nueve bolivianos cometieron delitos en su territorio, mientras que Bolivia sostiene que combatían el contrabando, un grave problema en esa zona.

El incidente volvió a poner en tensión las relaciones entre los dos países, enfrentados en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya por la centenaria reclamación marítima boliviana y la naturaleza de las aguas del Silala.

Morales consideró hoy que Bachelet está "como secuestrada" por la "soberbia" de algunas autoridades de su Gobierno "que representan a la oligarquía pinochetista" y que, a su juicio, impiden que haya un acercamiento entre ambos países.

El mandatario criticó que, pese a que "hay un partido socialista en función de gobierno" en Chile, "todo está privatizado" allá y opinó que eso se debe a que "la derecha, las oligarquías tienen infiltrados en todos los partidos".

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