ETA y las FARC se entrenaron en Venezuela, según un juez español

Madrid, AFP

Un juez español, que ha procesado a 13 miembros de ETA y las FARC por intentar atentar contra el presidente Álvaro Uribe en España, considera que miembros de ambas organizaciones se entrenaron en Venezuela, cuyo gobierno “cooperó” en la relación entre las dos organizaciones.

El juez Eloy Velasco, de la Audiencia Nacional (principal instancia penal española), considera que “obran diligencias en este procedimiento que ponen de manifiesto la cooperación gubernamental venezolana en la ilícita colaboración entre las FARC y la ETA”.

Para ello apunta al presunto miembro de la organización armada vasca Arturo Cubillas Fontán, casado desde 1990 con la “venezolana Goizeder Odriozola Lataillade” y que en 2005 fue nombrado “director adscrito a la Oficina de Administración y Servicios del ministerio de Agricultura y tierras de Venezuela”, según el auto judicial dado a conocer este lunes.

Según Velasco, Cubillas es “responsable del colectivo de ETA en esa zona de América desde el año 1999, encargándose de coordinar las relaciones con las FARC y la participación de integrantes de la ETA en cursillos de explosivos”.

Cubillas, que vive en Venezuela, y la presunto miembro de las FARC Remedios García Albert, ambos procesados, “gestionaron y organizaron” en agosto de 2007 que activistas de ETA impartieran “en la selva venezolana en una finca cercana a Guadalito en el estado de Apure (oeste) un curso teórico-práctico de unos 20 días a 13 miembros de las FARC y a 7 del FLB sobre técnicas avanzadas en el manejo del explosivo C4”.

A este curso, que se repitió “a continuación al bloque Caribe de las FARC”, acudieron los miembros de ETA “viajando por tierra vía Maracaibo con el conocimiento y la compañía de una persona que vestía chaleco con escudo de la DIM (Dirección de Inteligencia Militar de Venezuela) y de un vehículo escolta con militares venezolanos”.

Según el auto de Velasco, Cubillas ya había mediado en el verano de 2003 para que miembros de las FARC dieran “ adiestramiento militar a cuatro militantes de ETA ” y posteriormente, la organización armada vasca aprovechó  “ campamentos de las FARC instalados en territorio de Venezuela ” para hacer pruebas con vistas a conseguir artefactos explosivos.

La colaboración continuó, según Velasco, en diciembre de 2003, cuando las FARC entrenaron a ETA en el manejo de misiles tierra-aire, como los dos proyectiles SAM-7 incautados a ETA en octubre de 2004 tras la detención en Francia del entonces número uno político de ETA, Mikel Albizu Iriarte, alias “Antza”.

Velasco ha destacado las relaciones entre ambas organizaciones en “campamentos de las FARC en Venezuela” en el marco de una orden de procesamiento de seis presuntos miembros de ETA y otros siete de las FARC, entre ellos Cubillas y García Albert, por intentar atentar contra personalidades colombianas en España.

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