Al menos 220 personas han perdido la vida tras casi tres semanas de enfrentamientos en Marawi, ubicada en el norte de la isla de Mindanao. Foto: AFP
El Gobierno filipino confirmó hoy, 11 de junio de 2017, que Estados Unidos presta asistencia técnica a las tropas locales que combaten desde el pasado 23 de mayo a un grupo de yihadistas afines al Estado Islámico (EI) en la sureña ciudad de Marawi.
La ayuda, precisa un comunicado emitido por el Palacio de Malacañang, se limita a asistencia técnica y contradice las palabras del presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, que este domingo 10 aseguró desconocer la participación de efectivos estadounidenses.
El escrito también apunta que no hay soldados estadounidenses combatiendo a los islamistas sobre el terreno.
Según el último recuento oficial, al menos 220 personas han perdido la vida tras casi tres semanas de enfrentamientos en la citada ciudad, ubicada en el norte de la isla de Mindanao.
Los combates comenzaron el día 23 de mayo al fracasar una operación militar para capturar a Isnilon Hapilon, líder del grupo yihadista Abu Sayyaf, también vinculado al EI, y quien permanecía custodiado por miembros del Grupo Maute.
Los islamistas contraatacaron para tomar parcialmente la ciudad y prendieron fuego a una comisaría, un colegio, una cárcel y una iglesia, donde secuestraron a un párroco y 13 feligreses que mantienen cautivos.
Sin embargo, según fuentes gubernamentales, el asalto a Marawi también pudo ser planeado con anterioridad por la gran cantidad de suministros con los que parece contar el grupo armado.
El Ejército ha recuperado desde el primer día de batalla el 90 por ciento de la población y trata de liquidar “pequeños grupos de resistencia” parapetados tras un número indeterminado de civiles en los barrios del centro de Marawi.
Los soldados actúan al amparo de la ley marcial, declarada por el presidente en toda la región de Mindanao el mismo día que se desató el conflicto.