Redacción Mundo
Una tendencia que intenta imponer más controles en el trabajo de los periodistas y los medios de comunicación independientes se extiende en América Latina. Ese es uno de los ejes del especial que publicará mañana este Diario y que fue elaborado por el Grupo de Diarios América (GDA), que incluye a EL COMERCIO.
El especial resume también los métodos de presión cada vez más sutiles que afrontan los medios de varios países latinoamericanos. El caso más extremo de la presión gubernamental a la prensa tiene lugar en Venezuela, donde las reglas dictadas por el gobierno del presidente Hugo Chávez reducen paulatinamente los espacios para los medios que no son públicos.
Ecuador, Argentina, México y Colombia son otros países latinoamericanos con escenarios complicados para la prensa. En el primero, los medios independientes padecen el acoso de los gremios afines al Gobierno y una creciente discriminación en el reparto de publicidad oficial. Esta última práctica se replica en otras naciones.
En Ecuador, persiste la intención de imponer una ley de medios, que en la práctica establece una censura a los contenidos.
México y Colombia son de los estados más peligrosos para el ejercicio periodístico. En la otra orilla está Uruguay, donde la libertad de prensa impera.