Redacción Cultura
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Mundos alternos o lugares cotidianos: en las artes escénicas, la representación de un espacio invita al público a ser parte de una realidad paralela. El escenógrafo es el artífice de esa representación espacial.
Tipos de escenografía
Figurativa. Los elementos son realistas y contextualizan de forma directa. Aquí, ‘Las presidentas’, de K. Lupa.
Sugerente. Sin ser una copia exacta de la realidad, los elementos sugieren el lugar. Es el caso de ‘Heredarás un sueño’
Simbólica. Los elementos significan en el conjunto de la pieza. En ‘Paralelogramo’, una estructura es 6 lugares.
En las actuales obras nacionales, dentro del ámbito del diseño escenográfico, suenan los nombres de Roberto Frixone, quien mantiene una amplia trayectoria; de la española, con experiencia en la ópera, María Elena Mexía. También del chileno José Rosales, quien, además de vestuarista, como maestro ha formado a otros diseñadores, entre los que se hallan
Birmania Rubio, Gina Almeida y Sara Constante. Además está el caso de artistas que han dado el salto desde la plástica hasta las tablas.
En esta ocasión es Víctor Hoyos, quien nos brinda un testimonio de su labor. Este diseñador industrial ha direccionado su labor hacia las tablas desde 1992; en su experiencia cuenta trabajos con actores y bailarines, Klever Viera y Carlos Gallegos, por mencionar a dos. Actualmente, trabaja en las estructuras de la escenografía de la obra que Fundación El Triángulo estrenará proximamente.
Así, en su taller, entre maquetas, bocetos y metales, Hoyos explica que la creación de una escenografía es trabajo de todo el equipo, siempre hay reuniones, conversaciones. Si bien, la propuesta del espacio y la elección de los ambientes parte del director, el desarrollo nunca es una labor en solitario. “La obra cuaja cuando todos los elementos entran y juegan su papel complementario, iluminación, sonidos, utilería, interpretación”.
En sus trabajos, Hoyos pretende que la escenografía trascienda el mero decorado, dependiendo del estilo de la obra, y busca que las estructuras sean elementos que propongan, que acompañen al actor o al bailarín, que cumplan una función utilitaria (cuerpos, objetos, telones que definan un espacio) y no sean solo imágenes coloridas.
Cada diseñador funciona con un proceso propio. A Hoyos le interesa conocer a fondo el texto de la obra, conversar y mostrar los avances a los directores.
En correspondencia a la línea estética se da la selección de los materiales: metal o madera generalmente.
En medio de ello, con lápiz en mano (aún se rehúsa al uso del computador) traza líneas, figuras, ideas; investiga en función del objeto, de sus capacidades expresivas.
Víctor Hoyos considera que hay evolución en el diseño de escenografías en el país. Dice que cada vez es más etérea, “menos mueble y más objeto”.