Los periodistas y fotógrafos extranjeros se alojaron en la Boutique-Hotel Cultura Manor. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO
En sus 142 manzanas se pueden encontrar casas patrimoniales junto a modernas discotecas, restaurantes de comida nacional y también india, china, francesa, entre otras. Se puede escuchar misa en una iglesia y, a unos pasos, visitar un museo etnográfico.
La Mariscal agrupa a 1 892 negocios, y hoy los empresarios quieren hacer de la zona un centro de atracción turística. Ese es el objetivo principal del Buró Turístico La Mariscal, que se conformó a finales del año pasado, al que pertenecen, en el momento, 50 empresas.
Para Carlos de la Cruz García, coordinador de la asamblea ciudadana La Mariscal y miembro del buró, el objetivo es abrir un espacio para que moradores, empleados, estudiantes y las empresas relacionadas al ámbito del hospedaje, alimentos, bebidas y diversión nocturna, puedan aportar y construir una directriz que encamine al barrio.
El buró comenzó a formarse en julio del año pasado. De la Cruz explica que la motivación fue la necesidad de un espacio que represente a los comerciantes de la zona. La empresa privada -dice- debe tener voz. Además, aprovechar que La Mariscal fue declarada Zona Especial Turística con la Ordenanza Nº 236.
Los fines de semana, La Mariscal recibe 250 000 visitantes. Uno de los objetivos a largo plazo del buró es que las grandes cadenas que se ubican en la zona se unan y realicen inversiones en ella, en cuanto a seguridad y promoción.
Bajo esa perspectiva, László Károlyi, propietario de la Boutique-Hotel Cultura Manor y miembro del buró, junto a otros empresarios, realizan un proyecto para promocionar a nivel mundial no solo a La Mariscal sino a la ciudad y al país en general.
Un grupo de 10 camarógrafos, periodistas, presentadores y fotógrafos de varios países fueron invitados para recorrer, conocer y mostrar la ciudad al mundo.
Entre los invitados están Kurt Soderling, cinematógrafo de Hollywood que participó en la realización de las fotografías aéreas de películas como ‘Titanic’ y ‘Spider-Man’. También el fotógrafo de National Geographic Daniel Allen, las periodistas Irene Junquera y Eugenia Károlyi, y el documentalista Felipe Cordero.
Visitarán lugares emblemáticos de La Mariscal y del Centro. Uno de los reportajes abordará las características arquitectónicas y el proceso de restauración de la Boutique-Hotel Cultura Manor, casa patrimonial de 1930, ganadora del Premio de Ornato de 1933. El buró planea realizar ese tipo de eventos, al menos una vez por trimestre.
Este no ha sido su único proyecto. Hace cuatro meses organizó un concierto de música clásica en la esquina de las calles Jorge Washington y Páez, con la Orquesta Sinfónica Juvenil, con el apoyo de la Embajada de Hungría y de Quito Turismo. Se realizó, también, una serie de exposiciones fotográficas en el espacio público.
Ese tipo de proyectos se realizan en coordinación con la Administración Zonal. Para Alfredo León, administrador, el trabajo en equipo es fundamental para entender la visión que la zona debe tener con miras a despuntar en el ámbito turístico.
Asegura que de los cerca de 750 000 turistas que visitan Quito cada año, el 70% va a La Mariscal para hospedarse, alimentarse o pasear. La zona cuenta con 844 restaurantes, 44 hoteles y 121 hostales.
Según el urbanista Hugo Cisneros, este barrio nació como un espacio donde la gente adinerada que abandonó el Centro Histórico encontró más comodidad: veredas amplias, garajes para sus autos, casas enormes con influencias anglosajona y judía.
Poco a poco, se volvió el centro financiero de la ciudad y acogió a hoteles importantes, hospitales, ministerios, embajadas… Hoy, es el hogar de 191 bares, 126 cafeterías, 181 fuentes de soda (venta de helados, jugos, etc) y 82 discotecas.
El turismo es uno de los puntales de la zona. Allí funcionan 295 agencias de servicio y transporte turístico.
De la Cruz admite que aún hace falta trabajar en seguridad y en movilidad, pero asegura que se lo está haciendo a través de la Asamblea, de la Policía, de la administración zonal y de la Agencia de Control. León sostiene que se está trabajando en un plan especial que busca trazar una nueva ruta y hacer frente a esos problemas de manera más efectiva.
Para Patricio Velásquez, consultor en temas turísticos, es clave que los empresarios se involucren en esa dinámica y trabajen en coordinación con la autoridad. Así -dice- se lograrán desarrollar proyectos y nuevas oportunidades para los mismos negocios. Es importante, añade que se replique esa iniciativa en zonas como La Floresta y La Carolina.
Así se podría conformar un corredor turístico que conecte el Centro Histórico con otros barrios que cuenten con lugares atractivos, y que brinde a los visitantes la posibilidad de caminar entre puntos no muy lejanos y acceder a toda clase de servicios turísticos.