Mario Monteverde RodríguezUn manifiesto sin precedentes -donde se han unido ortodoxos, evangélicos, anglicanos y católicos- y que ha sido llamada la Declaración de Manhattan, se está difundiendo en los actuales momentos. La redacción fue encargada a los profesores Robert George, Timothy George, y Chuk Colson, y dice lo siguiente:“… La Corte Suprema, quien en 1973 con su decisión infame despojó a los que están por nacer de protección legal, continúa tratando el aborto voluntario como un derecho constitucional fundamental…El Presidente y muchos en el Congreso, están a favor de la expansión de la investigación de embriones humanos para ser matados… Al otro extremo de la vida, un movimiento aumentado poderosamente para promover la muerte asistida y la eutanasia “voluntaria”, amenaza las vidas de la vulnerable vejez y las personas discapacitadas…”.Esta cultura de la muerte también se está expandiendo peligrosamente, por toda la América del Sur. Reflexionemos.