En medio de un ritual andino, este jueves 28 de marzo recuperaron la libertad los dirigentes campesinos Carlos Pérez, Federico Guzmán y Efraín Arpi. Ellos cumplieron la sentencia de ocho días impuesta por el Primer Tribunal de Garantías Penales de Azuay por obstruir los servicios básicos.
Los tres, oriundos de Tarqui y Victoria del Portete, al sur de Cuenca, fueron detenidos el 4 de mayo del 2010, durante una protesta contra la Ley de Aguas. Esa protesta reunió a sectores opuestos a la minería a gran escala. Los manifestantes bloquearon la vía Cuenca-Loja, a la altura de Tarqui.
En agosto del 2010, estos líderes campesinos fueron sentenciados a un año de prisión. Pero el mismo fallo precisaba que a los acusados se les aplicaba la rebaja de la pena a ocho días, “por ser una lucha altruista”. Ellos pagaron una fianza de USD 3 000 para no ir a la cárcel hasta agotar todas las instancias.
El fallo de casación, en enero pasado, solo ratificó la sentencia y tenían plazo para presentarse para cumplir con la prisión hasta el pasado 21 de marzo. “De lo contrario perderíamos el monto de la fianza y nos detendrían en cualquier lugar”, señaló Pérez.
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A eso de las 10:50 de hoy, Pérez, Arpi y Guzmán abandonaron la cárcel en medio de una marcha de respaldo de familiares, amigos y vecinos. La gente portaba banderas azules con la frase En defensa del Agua. También asistieron la asambleísta Lourdes Tibán y Abigail Eras, una de los 10 detenidos por el caso Luloncota.
En los exteriores de la Cárcel realizaron un ritual de limpieza con flores y plantas nativas a los dirigentes. Pérez al abandonar el centro carcelario dijo que “hoy comienza con más fuerza la resistencia, vamos a defender el agua y nuestros páramos”, con nuevas movilizaciones de protesta.
Según Pérez, “han perdido el miedo al Señor Presidente (Rafael Correa) y si tenemos que volver a la cárcel, desde ese espacio haremos resistencia”.