Redacción Loja
Bajo un intenso sol, el peruano Édison Carreño caminaba sobre el puente internacional Lalamor, que fue terminado hace dos semanas. Su intención era llegar al cantón lojano de Zapotillo.
El miércoles pasado, Carreño recorría el puente, que tiene una longitud de 175 m por 6,10 m de ancho. La obra, que costó USD 2,5 millones, es de hormigón, vigas de acero y carpeta asfáltica. Antes, lo hacía por el río. Era la única alternativa para cruzar al otro lado de la frontera.
Vías dañadas
Entre el puente Lalamor y Sullana (Perú) hay 66 kilómetros y la vía está en construcción. Se requieren trazar 2 kilómetros para empatar con el puente.
En el lado ecuatoriano, la vía llega hasta el puente internacional. Pero su estado es malo, por el movimiento de tierra que hizo la contratista Cosurca.
Con este puente hay cuatro pasos hacia Perú desde Loja y Zamora Chinchipe. Los otros son los de Macará, Espíndola y La Balsa.La infraestructura está lista, pero antes de su inauguración se define un contrato complementario con el contratista Eduardo Jalil, para mejorar el acceso desde Ecuador. No hay iluminación ni puestos de control.
A Carreño le preocupa que del lado peruano aún faltan construir 2 kilómetros de vía, para tener acceso hacia el puente. En la actualidad, solo es posible que los vehículos ecuatorianos lleguen hasta la estructura, que es parte del Eje Vial 2 de Integración Fronteriza con Perú. La vía empieza en Arenillas (Ecuador) y llegará hasta Sullana (Perú). En total serán 244 kilómetros.
En esta carretera y en este puente internacional están puestas las esperanzas de 70 000 ecuatorianos que viven Zapotillo, Pindal, Celica, Puyango y Arenillas.
La reconstrucción de la vía en el lado ecuatoriano está suspendida. La empresa Cosurca dejó un 16% de avance, según el supervisor del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, Luis Ludeña.
El MTOP avanza en la liquidación del contrato con Cosurca y en la nueva adjudicación. Los vecinos esperan que la conexión terrestre se habilite lo más rápido. En esa zona, las familias dependen de la agricultura y del contrabando de productos entre Lalamor (Ecuador) y Alamor (Perú).
60 peruanos y 30 ecuatorianos que comercializan productos en esa zona, ya crearon un sindicato. Osmel Prieto, de 47 años, lidera la organización. Según él, comprarán carretas para cruzar por el puente. Hasta ahora, lo hacen por el río, caminando y en lanchas.
Además, el alcalde de Zapotillo, Ramiro Valdivieso, impulsa una planta de procesamiento de caña de azúcar para producir etanol. Hay 350 agricultores inscritos. Todavía no está definido el financiamiento.