Los propietarios de bares, discotecas y restaurantes participaron, ayer, en una marcha de protesta por las calles del centro de Guayaquil. Los convocó la restricción de horarios que está vigente para la venta de bebidas alcohólicas en este tipo de establecimientos.Unas 350 personas partieron desde el bar Shanny, en las calles Rumichaca y Víctor Manuel Rendón. Con gritos y con pancartas rechazaron la disposición que rige desde el pasado viernes. En los letreros pedían volver al horario anterior, que se evite la quiebra de negocios y, por ende, que no haya un aumento del desempleo. El objetivo era llegar a la Gobernación y exponer sus inquietudes. El gobernador, Roberto Cuero, atendió a una delegación encabezada por Enrique Barreiro, presidente de la Asociación de Propietarios de Establecimientos Nocturnos (Apden). “El señor Gobernador nos ofreció ser el enlace con los ministros de Gobierno y de Turismo, a fin de reunirnos en los próximos días y exponer nuestras inquietudes y presentar nuestras propuestas”, explicó Barreiro. Otro cartel decía: “Señores Ministros, no maten a Pascuales”. En la reunión también estuvieron representantes de los restaurantes de comidas típicas de la parroquia Pascuales y del cantón Durán, así como de los cangrejales de la ciudad. Una de ellas, Sonia Garzón, se quejó que la prohibición de consumir licor los domingos, cuando más clientes tienen, los afecta “pues platos como la fritada, salchicha y cangrejos se acompañan con cervezas”.Igual ocurre con los negocios en Playas, donde la mayor afluencia se da los fines de semana, especialmente los domingos.Cuero planteó que cada sector hiciera su propuesta con base en las características y necesidades de cada tipo de negocio.En el caso de los bares y discotecas, Barreiro dijo que el planteamiento es que se restablezcan los horarios habituales. Esto es hasta las 04:00 de lunes a sábado, en el caso de los negocios catastrados en el Ministerio de Turismo.Hasta el domingo, 422 infractores fueron detenidos en Guayaquil, como resultado de las restricciones vigentes en la venta de bebidas alcohólicas, desde el viernes pasado. Según el intendente Julio César Quiñónez, la sanción va de uno a cuatro días de prisión y una multa económica.La disposición indica que en las tiendas, comisariatos y licorerías se venderá cualquier tipo de bebida alcohólica, de lunes a sábado, hasta las 22:00.Mientras que en bares, restaurantes, cafeterías y centros de diversión nocturna, la venta está autorizada de lunes a jueves hasta la 00:00; y los viernes y sábado hasta las 02:00. El domingo se prohíbe su comercialización.