Antes del entrenamiento, Héctor González, estratega del Olmedo, da una charla de más de 30 minutos. Los 28 jugadores escuchan atentamente las instrucciones del ‘Pipa’ y al final aplauden para comenzar el trabajo físico.
El cuadro riobambeño ha alternado el primer lugar de la serie B con Mushuc Runa, de Ambato. Por eso, la directiva y el cuerpo técnico ya tienen en la mira la segunda etapa del campeonato.“Esta es una competencia de resistencia”, comentó el ‘Pipa’ González. “Necesitamos sumar la mayor cantidad de puntos para lograr el objetivo que es ascender a la categoría de privilegio”, añadió el director técnico ecuatoriano.
Para esta fase se mantendrá la base del equipo. Jorge Guevara, gerente del club, explicó que ningún futbolista es transferible y que se espera el regreso de Franklin Salas, quien se recupera de una lesión.
Para el estratega nacional, el equipo tiene más fortalezas que debilidades. “Los errores se analizan en el interior del equipo, pero necesitamos mejorar, pese a que el plantel está bien. Este torneo es exigente en el sentido de que no podemos resignar ningún punto”, comentó González.
Una de las claves del éxito, manifestó Luis Aimacaña, presidente del equipo, es que el cuadro no se desarmó. Los jugadores son los mismos desde cuando estábamos en la serie A. “Me pedían cambios de futbolistas, incluso cinco por uno, pero yo no acepté”.
El presupuesto mensual se definió con el aporte de los directivos de la cooperativa de ahorro y crédito Acción Rural. En total se reciben USD 50 000 de la entidad financiera, USD 8 500 de la taquilla y USD 15 000 de los derechos de televisión. Con esos rubros, agregó Aimacaña, se completa lo necesario para pagar las deudas.
Actualmente tienen un mes de retraso en los desembolsos de sueldos de la plantilla principal, pero eso no ha repercutido en el desempeño futbolístico del cuadro.Aimacaña adicionó que él mismo se trasladó hasta Argentina para contratar a los jugadores. Y la negociación es positiva, ya que Daniel Néculman es uno de los goleadores del torneo. “Se van a respetar los contratos de los jugadores, incluidos cuatro extranjeros y dos juveniles”, enfatizó el directivo.
Mushuc Runa planificó su proyecto futbolístico a dos años. El 80% de los jugadores (tiene 32 en total) es propio y el contrato con el técnico argentino César Vigevani se firmó por tres años.
Su presupuesto para el 2013 es de USD 1 200 000. En ese rubro se consideran los gastos que demandan la construcción del estadio y del complejo del plantel.El cuadro, que también ha mantenido una constancia en el primer lugar del torneo local, presentó el jueves pasado a sus nuevas contrataciones. Pedro Esterilla, Edmundo Zura y Walter Iza son las nuevas caras en el equipo del Ponchito, por su origen indígena. Los dos primeros jugaban en Deportivo Quito hasta el martes.
La motivación de los jugadores del Mushuc Runa es la seriedad de los directivos. Ignacio Quirino, uno de los refuerzos, aseguró que deben responder con buenos resultados al buen trato y a la puntualidad en los pagos.