La gastronomía lojana atrae al turista

En el Centro Histórico de Loja.  El bus de dos pisos recorre la ciudad, llevando a los turistas. De fondo se aprecia la Catedral de Loja. Fotos: Lilia Arias y Archivo / EL COMERCIO

En el Centro Histórico de Loja.  El bus de dos pisos recorre la ciudad, llevando a los turistas. De fondo se aprecia la Catedral de Loja. Fotos: Lilia Arias y Archivo / EL COMERCIO

Arveja con guineo, repe, sango, cuy asado, gallina cuyada, cecina de cerdo, horchata, miel con quesillo… son algunos platos típicos que identifican a la capital lojana. Estos son degustados por los 950 000 turistas nacionales y extranjeros que llegan cada año a la ciudad.

Por las fiestas de fundación, que se conmemoran hoy, se realizó la IV Feria Gastronómica. Allí, se mostró la nueva oferta de platos y recetas lojanas. En los 15 stands que se instalaron en la plaza de San Sebastián, se exhibieron otros platos ecuatorianos y de países invitados como Perú, Chile y Bolivia.

Para Daniel Bustos, de la Cámara de Turismo de Loja (Captur), la gastronomía es uno de los atractivos para los visitantes que llegan desde el norte del Perú y Europa, principalmente. También arriban desde Cuenca, Guayaquil. Machala, Esmeraldas y Manabí, sobre todo en agosto y septiembre, por la devoción por la virgen de El Cisne.

Además de la fe y de los espacios naturales y arquitectónicos, los visitantes disfrutan de las artes culinarias. La gastronomía lojana ha evolucionado con un toque gourmet. Son preparaciones elaboradas con ingredientes seleccionados, usando buenas prácticas de higiene y manteniendo al máximo sus cualidades organolépticas, dice la chef Mayra Llanes.

A esta gastronomía tradicional se suma la fusión con platos típicos de la provincia de Zamora Chinchipe y del norte del Perú, como el cebiche peruano, que es una porción de pescado crudo pasado por limón y picante. Se acompaña de tostado y rodajas de camote. Además está el seco de pato. Mientras que Zamora Chinchipe ofrece la tilapia y la guanta. Las preparaciones son diversas y se las ofertan con distintas salsas en la capital lojana.

Estas delicias pueden ser degustadas en los restaurantes de segunda y primera categorías, en donde ofrecen en sus cartas este tipo de comida tradicional, con un toque particular. En hoteles de lujo como Howard Johnson, Victoria, San Sebastián, Bombuscaro, Podocarpus… se oferta comida tradicional gourmet. El objetivo es brindar al turista un servicio completo.

Estos establecimientos de servicio forman parte de los 130 restaurantes que funcionan en la ciudad, según el Censo Económico del 2010. Este año se abrieron 35 nuevos locales, según datos del Departamento de Higiene del Municipio de Loja.

El 50% de los establecimientos ofrece platos a la carta de comida nacional e internacional.

El fortalecimiento de la gastronomía se sustenta en la capacitación que ofrecen las escuelas especializadas en este tema. Las universidades Técnica Particular de Loja y Nacional tienen escuelas de Turismo y Hotelería.

Más de 250 alumnos de ambos centros de estudios superiores estudian Gastronomía en sus módulos de Turismo. Aparte están las escuelas como Andes Chef Bolivariano, Sudamericano, la Castellana… especializadas en Gastronomía. En la primera, por ejemplo, 180 alumnos están inscritos en el semestre que va de octubre del 2013 a marzo del 2014 para cursar esta carrera profesional.

En Loja no se registra cuántos de estos profesionales se abren sus propios negocios, sin embargo a Captur están asociados profesionales que recibieron algún tipo de conocimiento en estas escuelas, además de migrantes que llegaron con una idea de negocio, sobretodo en la rama de servicios para atraer al turista.

Dentro de la malla curricular de las escuelas gastronómicas consta la materia Cocina Ecuatoriana. Cada región del país es tratada de forma especial. En el caso concreto de Loja, la variedad de los platillos se fija por la calidad y gama de frutos que se cultivan.

Para Bustos, esta diversidad gastronómica permite exponer a la ciudad de Loja como un destino turístico que muestra su tradición cultural y natural, a través de sus preparaciones diversas.

A simismo, Leonidas Tello, inversionista turístico, dice que la gastronomía lojana ha permitido ganar el interés entre los turistas nacionales e internacionales.

Según la experiencia de este empresario, un 80% de sus clientes consume horchata, cecina de cerdo, repe y arveja con guineo. "La curiosidad es grande y cuando lo prueban se quedan satisfechos".

En el restaurante Caffeto del Hotel Bombuscaro, ubicado en el centro de Loja, la fusión gastronómica se observa en las tilapias al ajillo que se sirven acompañadas con papa y lechuga.

Mientras que la cecina de cerdo, se sirve junto a yuca cocinada, aguacate y ensalada de cebolla. El toque que marca una diferencia es la salsa dulce de mango.

Los hermanos Miño Naranjo, disfrutaron de la cocina tradicional lojana, el viernes pasado. La arveja con guineo es su preferida, por su sabor singular. Esa noche brindaron un espectáculo artístico en el evento denominado las Noches de la Lojanidad, que se celebró en la plaza de San Sebastián por los 465 años de fundación.

Otros atractivos
El Jardín Botánico Reinaldo Espinoza, ubicado al sur de la ciudad, es visitado por los turistas. Aquí se muestra variedad de plantas que se encuentran en el parque Podocarpus.

Otro de los poblados  que atrae a los visitantes son los valles de Vilcabamba y Malacatos. En agosto, septiembre y octubre se registra a unos 3 000 turistas de diferentes nacionalidades.

El Municipio de Loja  promueve el Turismo Solidario en las parroquias suroccidentales del cantón. Esta oferta consiste en mostrar las tradiciones culturales de los pueblos. Esto incluye la gastronomía.

Los dulces son muy solicitados. En Loja se ofrece roscones y bizcochuelos. También se elaboran panes de bollos y de figuras como cerdos, caballos y muñecas. Otra especialidad de la capital lojana son los bocadillos de maní y azúcar.

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