La ceniza cae en dos provincias

La actividad del volcán Tungurahua bajó en las últimas 24 horas frente al incremento que se registró el pasado martes. Jorge Bustillos, técnico del Instituto Geofísico, lo confirmó ayer.

A pesar del decrecimiento de los bramidos, las vibraciones y la caída de ceniza, esta situación inquieta a los habitantes de los pueblos cercanos. “Se han presentado emisiones de gas con una ligera carga de ceniza. El miércoles, el penacho de polvo volcánico alcanzó tres kilómetros de altura”, señaló Bustillos.

El polvo volcánico se dirigió al norte y al occidente. Cayó en un perímetro de 10 kilómetros desde el cráter. Allí se encuentran las poblaciones de Bilbao, Pillate y Cahuají.

Pablo Sánchez, vigía de la comuna El Manzano, en el cantón Penipe (Chimborazo), dijo que desde el martes desciende una fina ceniza negra.

“Es casi imperceptible y la población se mantiene en expectativa. Cuidamos las casas, cultivos y animales. El martes nos asustamos y salimos de nuestras viviendas. Pero ahora (ayer) el volcán parece tranquilo y seguimos trabajando”.

En El Manzano se dejó de sembrar cerca al volcán. Esto ocasiona migraciones hacia Riobamba para trabajar.

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