El proceso de llenado del embalse de 31 kilómetros de la nueva central hidroeléctrica Mazar sacó a flote el problema de la basura en las riberas del río Paute.
El afluente, del cual se obtiene el agua para generar energía, acarrea desechos de los cantones azuayos Sevilla de Oro, Guachapala, El Pan, Gualaceo, Paute y Cuenca. También de Azogues (Cañar). En la parte baja de Las Palmas, la situación es evidente.En el sector de Chalacay, a las orillas del embalse, el jueves pasado, flotaban los cuerpos de cuatro cabezas de ganado. El olor era insoportable porque los restos estaban descompuestos. Asimismo, una capa de plásticos y troncos flotaban en el embalse.
Para el alcalde de Sevilla de Oro, Bolívar Tapia, el problema debe solucionarse junto con los burgomaestres de la región. “No podemos solucionar solos, porque la basura llega de cantones grandes como Cuenca y Azogues”.
La basura no solo se acumula en Chalacay. También en zonas como Tuncay (Paute) y Santa Rosa (Sevilla de Oro), desembocadura del río Pindilig (Azogues).
Tapia mantiene la posición que Sevilla de Oro no es el causante de la acumulación de la basura en el embalse. Reconoce que el cantón no tiene un plan de recolección de basura en la ribera del río, pese a estar ubicado en la margen del Paute. “De ninguna manera culpamos al proyecto Mazar”.
En Las Palmas, en el centro parroquial, Leonor Campos administra una tienda. Sabe bien que debe sacar la basura los lunes y viernes, pasado el mediodía. “Si los desechos no están en fundas, los recolectores no recogen”.
La azuaya de 22 años asegura que los vecinos no arrojan los desperdicios al río Paute. “Se acumula la basura de otros cantones”.
Lo mismo opina Verónica Zaldumbide, habitante de Las Palmas. “No nos gusta botar la basura al río, cuando vemos que alguien lo hace, lo denunciamos”. En la parroquia se recolectan 16 m³ de basura a la semana. En el resto del cantón Sevilla de Oro son 35 m³.
La Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec) contrató a 17 personas para recoger la basura del embalse. Ellos recorren en cuatro botes y en los mismos se transportan los desechos que recolectan con la mano: botellas plásticas, fundas, troncos, etc.
Según Paúl Urgilés, de la Unidad de Gestión Ambiental de la Celec, aún no se determina qué cantidad de desechos se recoge a diario. El plan de manejo ambiental de Mazar establece la limpieza a pie de presa y se realiza desde hace tres meses. “Pero no contábamos con la acumulación de tanta basura”.
Hasta el momento ya se recolectaron 20 restos de animales muertos, que se los entierra en los terrenos adquiridos por la Celec. La limpieza de desechos no orgánicos será constante. Esa basura reposa en un terreno de la entidad y se analiza a dónde irá.