Londres/Seattle, DPA
En muchos países en desarrollo la mortalidad entre las madres está retrocediendo, en tanto que en Estados Unidos, Canadá o Dinamarca aumenta notablemente, según un nuevo estudio de la universidad de Washington (Seattle) publicado hoy en la edición digital de la revista londinense “The Lancet”.
Según la investigación, la mortalidad en mujeres embarazadas o durante el parto ha aumentado especialmente en Estados Unidos: en 2008 murieron un 42 por ciento de mujeres más que en 1980.
La tasa de mortalidad en madres, que refleja el número de casos mortales por cada 100 000 partos, subió de 12 a 17.
Por un lado, es cierto que el aumento se debe en parte a los nuevos métodos de medición, aunque eso no lo explica todo, añaden los científicos.
En Canadá, la tasa ha aumentado del seis al siete por ciento, y en Dinamarca del siete al nueve. El estudio no menciona posibles motivos.
En total, en la mayoría de países la tasa se redujo, especialmente en China, Egipto, Ecuador y Bolivia, señala el equipo liderado por Christopher Murray.
También hubo buenas noticias en cuanto a la media mundial: mientras que en 1980 perdieron la vida medio millón de mujeres durante el parto, en 2008 fueron 343 000, cerca de un 35 por ciento menos.
Italia, con una tasa del cuatro por ciento, tiene el porcentaje más bajo del mundo.
El riesgo de mortalidad para las madres es especialmente alto en la India, Nigeria, Pakistán y otros países emergentes y en desarrollo.
En muchos casos, la mortalidad se relaciona con el sida. Para el estudio se utilizaron datos de 181 países.