Quito. AFP, ANSA
Después de 23 años, Ecuador se retira de un centro internacional de arbitrajes adscrito al Banco Mundial, donde enfrenta millonarios reclamos de petroleras extranjeras, según el Decreto Ejecutivo 1823 suscrito ayer por el presidente Rafael Correa.
El Gobierno “dio por terminado el convenio” mediante el cual reconocía la jurisdicción del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi)”, que estaba en vigencia desde enero de 1986, señala la resolución.
Correa firmó el Decreto después de que el Legislativo, dominado por el oficialismo, aprobara el retiro de un organismo que había sido fuertemente criticado por el Gobierno por supuesta parcialidad. El Mandatario adujo en su momento que el acuerdo con el Ciadi violaba un artículo constitucional, que prohíbe “tratados internacionales en los que el Estado ceda jurisdicción soberana a instancias de arbitraje internacional”.
Ecuador enfrenta en el Ciadi reclamos por USD 12 994 millones -una cifra mayor a la de su deuda externa-, la mayoría presentados por petroleras extranjeras que alegan incumplimientos contractuales.
El Decreto no anula las demandas de las firmas extranjeras, aunque lo blinda frente a futuros reclamos, según abogados.
El 20 de junio, Correa advirtió que expulsaría a las petroleras extranjeras que interpongan demandas internacionales en contra del Estado ecuatoriano por controversias contractuales. La mayoría de demandas es de petroleras como la francesa Perenco y las estadounidenses Burlington y Occidental (Oxy, que exige unos USD 3 200 millones).