Redacción Sociedad
Los 90 años no pesan a María Ruano. Desde que el terremoto de 7,3 grados en la escala de Ritcher afectó a Haití, el 12 de enero, pensó cómo ayudar a los afectados. Dos días después se unió a la Defensa Civil (DC) como voluntaria.
Horas enteras pasa en la amplia y oscura bodega de la institución (norte de Quito), a donde han llegado más de 400 toneladas de agua, comida… de todo el país.
PARA DONAR
Coca-Cola abrió la cuenta número 5471872100 del Banco Pichincha a nombre de la Cruz Roja Ecuatoriana-Consulado Haití.
Banco Bolivariano aperturó la cuenta corriente 5005041599 a nombre de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana.
Supermaxi y Megamaxi informan que la donación, en efectivo o con tarjeta de crédito, se puede hacer en las cajas de todas las localidades en el país.
Banco Promerica abrió la cuenta 6911911911 del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas. “ Tu contribución es importante, no importa la cantidad”, dice el mensaje.
Diners Club y Unicef Impulsan una campaña. Los aportes se pueden hacer a través del botón de pagos en www.dinersclub.com.ec; llamando al ‘call center’ 298 1400; enviando un mensaje de texto al 6466 con la palabra Haití o mediante depósitos en la cuenta de ahorros de Unicef número 4705390400 de Banco Pichincha.
Defensa Civil. Para comunicarse puede
llamar al 254 9119, 255 8064, 252 8232, en Quito.
Conferencia Episcopal
Ecuatoriana tiene los
números 222 3139 hasta el 3114. Las oficinas están en la avenida América y La Gasca (norte de Quito). La página www.iglesiaecuador.org.ec tiene más datos.
El jueves salió temprano desde su casa (Oriente y Benalcázar, en el Centro). Con su nieto, Michael Camacho, de 11 años, llegó a la DC a las 08:00 y comenzó con el trabajo. Las gafas negras nunca se sacó. Levantó las botellas más pequeñas con agua y acumuló en un solo lugar. Igual hizo con los cartones vacíos. Allí no estuvo sola. Más de 20 voluntarios recibieron y clasificaron las entregas.
A su vez, Mercedes Calahorrano dejó de ir a la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los últimos días para dedicarse a ayudar. “Estoy alegre de estar aquí, porque en cualquier momento eso nos puede tocar a nosotros”.
Los voluntarios están en escuelas, colegios, instituciones públicas, empresas privadas, banca…
En el colegio Paulo Sexto estudia Nicol Araujo. Ella es hija de Henry Araujo, uno de los cascos azules ecuatorianos que vivió el terremoto. La alumna pide que todo el país se una por Haití.
Hace 15 días, en este colegio recolectaron 100 cajas de atún, 48 enlatados y agua. Susana Abril, la doctora del colegio, cuenta que los alumnos entregaron dinero y todo se compró al por mayor.
El viernes 12, por el Día del Amor y la Amistad, que se recordará dos días después, habrá otra colecta. La presidenta del Consejo Estudiantil, Andrea García, lidera el trabajo interno. “Nuestra campaña es Corazones unidos por Haití y el eslogan: una mano amiga salva mil vidas”.
En el Colegio Montúfar fue igual. Se donó 1 020 botellones con agua, 1 875 conservas (atún y fréjol), pañales desechables, jabones, pastas dentales… La rectora Fanny Rodríguez recordó que los chicos llevaron los productos.
La multinacional Coca-Cola puso a disposición una cuenta de ahorros en la que José Paredes depositó USD 5. “Cualquier cosa es buena para nuestros hermanos en desgracia”, dijo este quiteño que el jueves buscaba cómo ser voluntario de la Defensa Civil.
En un comunicado, Carlos Ibáñez, de RR.PP. del Banco Bolivariano, indicó que, en coordinación de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) y Bankard, presentaron la campaña Juntos por Haití. Por cada dólar donado, Bankard contribuirá con igual cantidad a la CEE. Supermaxi, en cambio, aportó USD 110 000.
La Iglesia Católica emprendió la tarea en las provincias. En Loja recolectó USD 60 000. El obispo Julio Parrilla dijo que el miércoles estará en Quito con representantes provinciales para informar cuánto sumaron en todo el país.
En la Cruz Roja no se ha parado el trabajo. La coordinación nacional de Donación voluntaria de sangre, María Gloria Kraljevic, indicó que la intensidad bajó, pero aún recolectan sangre para Haití. Ya se enviaron 150 pintas del tipo O negativo. La funcionaria señaló que hubo mucha acogida de la gente. Con esa convicción, doña María Luisa contó que estará hasta el último como voluntaria…