La pequeña Alison fue enterrada en Guayaquil con apoyo de sus vecinos

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Una niña de 2 años murió ahogada al caer en una alcantarilla en la cooperativa Cordillera del Cóndor, sector El Fortín, un barrio popular de Guayaquil. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO.

El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, anticipó que la contratista Becerra y Cuesta, encargada de una obra en la que murió ahogada una menor en el noroeste de la ciudad, será sancionada por no señalizar el área de los trabajos.

La noche del último viernes una menor falleció en el sector de la cooperativa Cordillera del Cóndor, al caer en el hueco de una alcantarilla abierta por los trabajos de construcción que se realizan en el sector.

Nebot dijo que por Ley, toda contratista está obligada a colocar las debidas señales de seguridad. “Si no tiene conciencia, lo exhortaremos a que se haga presente con la familia de la niña”.
En el sitio del accidente, la alcantarilla en que se ahogó la pequeña niña fue sellada este martes 12 de agosto. Sobre el material de relleno de los trabajos previos al asfaltado está colocada una piedra.

El barrio, ubicado en la cooperativa Cordillera del Cóndor, está de luto. En la manzana 532 la pequeña Alison A., de 2 años 5 meses, salió de su casa y no se supo de ella hasta que fue ubicada por su abuela, Nelly González, dentro de una alcantarilla.

Ella sacó a su nieta y trató de reanimarla sin éxito. Sus familiares la llevaron al hospital Universitario donde comprobaron su muerte por ahogamiento.

María Toala, moradora de la barriada, vive a escasos 10 metros de la alcantarilla. Dice que siempre permanecía tapada. “Es posible que, como están trabajando, alguna maquinaria la abrió. Adentró había como dos metros de agua”.

El velatorio de Alison fue de tres días. La falta de dinero impedía que descanse en paz en su tumba.

González dice que son una familia de escasos recursos y que los padres de la pequeña no tienen trabajo.

“No hemos tenido la ayuda de nadie. Aquí vino un ingeniero de la constructora a ofrecernos una ayuda para los gastos mortuorios, pero querían que les firmen primero un papel. Decían que nos iban a dar USD 2 500 y que les firmemos pero les dijimos que no estábamos haciendo negocio por la niña”, expresó la abuela de la menor.

El lunes, ante la falta de recursos y la necesidad de dar sepultura a sus restos, la familia recurrió a la generosidad de amigos y vecinos para reunir USD 300 para asegurar la bóveda en el cementerio Parque de la Paz, de Pascuales. Alison fue sepultada a las 16:00.

Sin embargo hay otros gastos pendientes, como el pago mensual de las cuotas por el uso de la tumba por lo que apelan a la ayuda de las personas de bien y de las diversas instituciones.

Los padres de la pequeña, Carlos y Dayana, no tienen trabajo. Tampoco casa. Actualmente habitan en la vivienda de doña Nelly. Allí extrañan la alegría y la espontaneidad de Alison.

La concesionaria Interagua, mediante un comunicado, indicó que los trabajos de instalación de alcantarillado sanitario en esa zona finalizaron el 30 de septiembre del año pasado, “quedando la obra completada y los sistemas debidamente cerrados”.

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