César Navas (Seguridad), Xavier Lasso (Canciller-e) y Sandra Naranjo, participaron del encuentro con los diplomáticos. Foto: Maria isabel Valarezo / EL COMERCIO
El Gobierno activa el escenario de la cooperación internacional ante el aumento de la actividad del volcán Cotopaxi y la inminente llegada del fenómeno de El Niño. Con este objetivo, diplomáticos acreditados en el Ecuador acudieron ayer al Ministerio de Relaciones Exteriores para conocer el estado del volcán en su proceso eruptivo y las repercusiones que tendría el país por la llegada de El Niño.
En la cita se definió que desde el Gobierno ecuatoriano, se establecerán las listas de los recursos necesarios, principalmente, para jornadas de prevención. Así lo informó el ministro coordinador de Seguridad, César Navas, quien participó del encuentro.
Estas serán ofrecidas por los países según sus capacidades. Además de kits de seguridad, equipamiento para los albergues, maquinaria, generadores, plantas potabilizadoras de agua, entre otros requerimientos, está el recurso humano.
La lista será depurada y se entregará a través de la Cancillería para que, a su vez, la envíe a los diplomáticos; no solo a los extranjeros, sino también a los embajadores del Ecuador en el mundo para avanzar en la cooperación internacional.
En esta línea, el embajador de Italia, Gianni Piccato, indicó que su aporte será desde la experiencia que tiene su país en este tipo de eventos. Según él, su patria tiene un patrimonio de experiencia en calamidades naturales muy fuertes.
Perú también se unió a los compromisos en la emergencia. La ministra Roxana Castro apuntó que la reunión no fue solo para que el Ecuador solicitara la colaboración, sino también un espacio para ofrecer el apoyo por parte de las delegaciones extranjeras.
En estos casos, desde su experiencia, Castro explicó que se activan diversos mecanismos. Uno de ellos es precisamente que las embajadas proporcionan productos que necesitan los países. En la cita no se dieron recomendaciones o restricciones para que los diplomáticos difundan las noticias entre sus coterráneos. En el caso de Perú, hay aproximadamente 7 000 personas que viven en Pichincha, Cotopaxi, Tungurahua y Esmeraldas.
Francia, por su parte, según el primer consejero de la Embajada, Fabien Muoury, tiene registrados a alrededor de
2 000 franceses que viven en el Ecuador y llegan anualmente entre 20 000 y 25 000 turistas.
Muoury añadió que en la reunión se les ofreció entregar información periódica sobre la situación del Cotopaxi, para, a su vez, comunicarla a sus representados. Esto incluye datos sobre carreteras, aeropuertos, entre otros.
Según Navas, van a trabajar planes de contingencia con las embajadas que lo requieran, para actuar en caso de una posible erupción del Cotopaxi. A la reunión asistieron el ministro de Relaciones Exteriores (e), Xavier Lasso; María del Pilar Cornejo, secretaria de Gestión de Riesgos; y Sandra Naranjo, ministra de Turismo. También Hugo Yepes, exdirector del Instituto Geofísico, estuvo presente en la cita de ayer.
A decir de Lasso, el país está preparado para afrontar esta situación y que la capacitación y la información de fuentes oficiales permitirá que quienes habitan el territorio ecuatoriano o que estén de visita, tengan seguridad y respuesta inmediata de las autoridades.
Además, Navas confirmó que no existe ningún cambio en la alerta. Hasta ayer se mantenía en amarilla. Los diplomáticos recibieron una explicación sobre el trabajo que se ha dado desde las instituciones públicas para atender a la población, adquirir equipos e insumos adecuados ante la caída de ceniza.
La preocupación por El Niño es algo que ha causado alarma internacional. Lo han denominado “Niño Godzila” o “Niño Extraordinario”.
En Chile, en donde también se sentirá las afectaciones de la elevación de la temperatura del Pacífico, pronosticó, un aumento de temperatura y lluvias. La última vez que hubo un fenómeno parecido (1997) que se pronostica, el PIB de Perú, por ejemplo, cayó un 7%, según la agencia Efe.