La Cancillería emitió un comunicado hoy, 11 de diciembre, respecto al reporte del Comité del Senado de EE.UU. sobre la aplicación de torturas a sospechosos de terrorismo, por parte de la CIA.
El documento revela que las tácticas fueron ineficaces y más brutales de lo que se creía. Y ha causado un revuelo en el escenario internacional, mientras los funcionarios del Servicio de Inteligencia intentan defender sus actuaciones.
El Gobierno ecuatoriano se unió a las críticas y “condena la tortura en todas sus formas, la que constituye una grave violación a los Derechos Humanos”. Y llama la atención a la comunidad internacional para que estas violaciones no vuelvan a ocurrir.
Esta polémica sirvió para que el Gobierno retome sus argumentos contra EE.UU. por no ratificar los tratados internacionales sobre Derechos Humanos y que la sede de la Comisión Interamericana de DD.HH. tenga su sede en Washington.
El comunicado de la Cancillería dice que llama la atención a Estados Unidos para que ratifique dichos instrumentos internacionales, especialmente el Protocolo Facultativo de la Convención Internacional contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, la Convención Americana sobre Derechos Humanos y la Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura.
Además, el Gobierno reiteró su rechazo a “los informes anuales unilaterales vertidos en materia de Derechos Humanos por los Estados Unidos, país que demuestra su inconsistencia en el cumplimiento de estos principios”.