En la cooperativa de vivienda Una Sola Fuerza las calles están inundadas. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
La declaratoria de emergencia del cantón Durán, que hizo el Comité de Operaciones de Emergencia el pasado 6 de abril, no ha apresurado las tareas de mitigación de los efectos causados por las continuas precipitaciones.
Zonas enteras de la periferia del cantón permanecían hasta este miércoles, 8 de abril de 2015, completamente anegadas, como consecuencia de la acumulación de aguas lluvias.
La situación más problemática la viven los pobladores de la cooperativa Una Sola Fuerza, un sector en el noreste del cantón que carece de sistemas de desfogue de las aguas. Esto provocó que el agua se acumule en las calles de tierra y alrededor de las viviendas, la mayoría levantadas con cañas.
En la etapa I de este asentamiento, los moradores deben atravesar lagunas de aguas estancadas, entre malezas y basura, para poder llegar desde sus viviendas hasta la vía asfaltada más cercana.
El pasado martes la Municipalidad de Durán llevó a un sector de esta cooperativa, que todavía no está legalizada, vituallas y ‘kits’ de aseo. El agua acumulada, sin embargo, ha bajado poco de nivel.
En otro sector de Durán, las constantes lluvias han provocado deslizamientos de tierras. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
Al otro costado del cantón, en la cooperativa Los Almendros, una serie de casas asentadas en la ladera del cerro conocido como Las Cabras está en riesgo.
El sábado 4 de abril, un intenso aguacero aflojó nuevamente la tierra de una de las laderas del cerro y las rocas cayeron sobre un grupo de casas. Una de las rocas, de alrededor de tres metros de longitud, se deslizó sobre una de las viviendas de construcción mixta y la destruyó parcialmente.
La alcaldesa Alexandra Arce menciona que al menos 37 familias asentadas en las faldas del cerro deben ser reubicadas ante el temor de más deslizamientos.