Caracas, AFP
La depreciación de la moneda oficial venezolana, el bolívar, anunciada el viernes, favorece al sector público en un año de elecciones y tendrá un impacto negativo en la inflación del país, que superó el 25% en 2009 y es la más alta de América, afirmaron expertos.
Uno de ellos es el economista Orlando Ochoa, quien considera que el Gobierno del coronel Hugo Chávez devalúa la moneda porque en septiembre de este año se celebrarán las elecciones para diputados a la Asamblea Nacional. “Con esta medida duplicarán el ingreso”, aseguró. Además, según el experto, “por dar más flujo de caja a (la petrolera) Pdvsa nos está llevando a esta situación”.
Explicó que con la nueva tasa cambiaria al Gobierno le “entra un respiro porque tendrán el doble por exportaciones”, pero aseguró que con el anuncio la inflación se va a acelerar: “Los precios van a subir. Los venezolanos que ya están pasándola mal van a tener más dificultades”.
El presidente Chávez anunció que de los 2,15 bolívares por dólar en vigor desde 2005, el dólar pasa a valer en Venezuela 2,60 bolívares para sectores considerados prioritarios, como alimentos, salud, remesas e importaciones del sector público, y 4,30 bolívares para el resto.
“Sería tonto por mi parte negar que esta medida vaya a generar impacto en los precios”, admitió el ministro de Finanzas, Alí Rodríguez, afirmando que la inflación en 2010, calculada en principio entre 20 y 22%, aumentará entre un 3 y un 5% por encima de estas previsiones.
Para los expertos, será el ciudadano quien pague el precio de esta depreciación. Efectivamente, gracias a esta devaluación, el Estado venezolano recibirá más bolívares por cada dólar obtenido en sus ventas de petróleo.
Para el ex directivo del Banco Central venezolano, José Guerra, habrá “más plata para el Gobierno y menos para la gente”.
“Devaluación sin medidas fiscales y monetarias quiere decir inflación”, zanjó, anticipando una pérdida importante del poder adquisitivo del venezolano.
“Los vehículos, por ejemplo, serán importados a un dólar a 4,30 bolívares. Eso significa 100% de aumento (con respecto al 2,15 en vigor hasta el viernes). ¿Cuánto costará un carro ahora?”, se preguntó.
Para el partido opositor Primero Justicia, estas medidas son “un batazo (golpe) en el estómago” de los ciudadanos. La formación llamó “hipócrita” al Gobierno, ya que previó un presupuesto para 2010 sin devaluación y una inflación del 20%.
Para el Ministro de Finanzas, con estas medidas se “frenará un abrupto incremento en el costo de los bienes importados”, de los que Venezuela depende.
En 2009, el desplome de los precios del petróleo provocó una reducción en la entrada de divisas y obligó a disminuir la concesión de dólares al precio oficial para los ciudadanos. Muchos acudieron al mercado paralelo, donde el valor del dólar se disparó. Expertos en el tema calculan que en los últimos meses dos tercios de los productos que entraron en Venezuela lo hicieron con dólares comprados en este mercado paralelo.