Jerusalén, DPA
Arqueólogos israelíes descubrieron un acueducto de unos 1 800 años de antigüedad en las excavaciones que se están realizando junto al casco viejo de Jerusalén, informó hoy la oficina de Antigüedades israelí.
Se trata de una construcción en piedra, que servía para transportar agua en el siglo II d.C. Parte del acueducto estaba enterrada debajo de una calle que va de la muy concurrida puerta de Jafa, a la ciudad vieja, informaron las autoridades.
La construcción es uno de los dos acueductos que en su momento fueron erigidos para suministrar agua a la populosa ciudad de Jerusalén, con agua procedente de las montañas. Las piezas recuperadas muestran que el acueducto tenía unos 60 centímetros de ancho y un metro y medio de altura.
De las otras excavaciones cerca de Belén se sabe que su longitud total era de 13 kilómetros. Durante la excavación se descubrió sólo una cara del acueducto, según dijo el responsable de las excavaciones, Ofer Sion.