La Ecuafútbol está en la obligación de transparentar la venta de los derechos de televisión de la Selección para las próximas eliminatorias del Mundial 2014. Es extraño que de nuevo se pretenda entregar esa exclusividad a una empresa (Full Play) que ha venido pagando cifras irrisorias con relación a otros países.
¿Qué hacer? Una licitación pública puede ser el camino que termine de favorecer a un grupo que pagó solo USD 4 millones por cada edición de la eliminatoria (2006 y 2010). Un dato revelador es que para el período 1998- 2002 se pagaron USD 9,2 millones. Los clubes y asociaciones, el Ministerio de Deportes y la sociedad tienen que exigir que el nuevo contrato sea público, con más ofertantes y con un rubro mayor. No hacerlo es darle licencia a una cuestionada administración de la Ecuafútbol que aún no rinde sus cuentas y que quiere perennizarse.