Manuel Quizhpe. Cuenca
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El partido se resolvió en los primeros 14 minutos de juego. En ese tiempo, Deportivo Cuenca marcó tres goles en la portería del Independiente del Valle por intermedio de John Narváez, Jorge Ladines y el argentino Luis Escalada.
La hinchada cuencana se ilusionó con ese inusual marcador, incluso los locutores radiales se engañaron al anticipar que “viene la goleada”. Lo planificado por el técnico brasileño Janio Pinto, durante la semana, se acabó con dos cabezazos y una jugada colectiva.
CURIOSIDAD
En este año, los hinchas cuencanos llegan al estadio con gorras que llevan cuernos para identificar al equipo como los “Diablos Rojos”. Niños, jóvenes y adultos lo usan, aunque hay criterios divididos al respecto. En el escudo del club se destaca un león.Pinto, como de costumbre, planteó un conjunto capaz de jugar de igual a igual, con un sistema 4-4-2. Ese mismo planteamiento lo utilizó el estratega cuencano Paúl Vélez. La diferencia estuvo en los intérpretes, puesto que los locales buscaron el arco contrario desde el pitazo inicial del árbitro Samuel Haro.
Como consecuencia de aquello, en el primer minuto de juego, Narváez abrió el marcador. El defensa juvenil recibió un balón en el área rival y con certero cabezazo venció al golero paraguayo Librado Azcona, tras un tiro de esquina cobrado por el volante argentino Gabriel Méndez.
Narváez llegó como un atacante no programado. Los defensas centrales Diego Ianiero (argentino) y Marco Quiñónez son quienes trepan en las jugadas de pelota quieta. Precisamente, Quiñónez amagó que iba a cabecear y dos rivales fueron en su marca. Narváez cabeceó a placer al ángulo izquierdo de Azcona.
Ese gol sirvió de inyección anímica para los integrantes del ‘Expreso Austral’. Insistieron y se impusieron en el medio campo. Allí sobresalieron Méndez y John García. En cambio, los dirigidos por Pinto estaban perplejos.
La segunda anotación se registró al minuto 5, cuando aún los integrantes del Independiente no se recuperaban del golpe psicológico que significó el tanto de Narváez. En esta ocasión marcó Ladines, quien también sacó ventaja de un tiro de esquina cobrado con precisión por parte de Méndez.
Escalada marcó el tercer gol a los 14 minutos del encuentro luego de un pase de Ladines y un remate cruzado al costado izquierdo de Azcona. Lo festejó con sus compañeros y con la hinchada. Fue su tercer tanto consecutivo en el torneo nacional de fútbol. Antes convirtió en la portería de Macará y Universidad Católica.
Escalada está agotado por la seguidilla de juegos y por eso lo cambié.
Paúl Vélez
Técnico del Deportivo Cuenca. El equipo local insistió ante la poca reacción del adversario. Lo hizo hasta los 30 minutos, porque después de dedicó a defender el resultado con un fútbol conservador e inteligente. Méndez, Cristian Cordero y José Granda se encargaron de controlar el balón y lanzar balones para el contragolpe de Escalada y Ladines.
En la primera etapa, Independiente del Valle tuvo cuatro llegadas con cierto peligro al arco del conjunto colorado. Pero, el golero argentino Esteban Dreer controló sin problemas las arremetidas de Armando Wila, Víctor Chinga, el paraguayo Richard Estigarribia y Daniel Samaniego.
El ataque de Estigarribia disgustó a un apacible técnico Vélez, quien recriminó un error registrado a los 32 minutos por Juan Guerrón. Este defensa perdió el balón y el delantero paraguayo por poco marcó el 3-1 con un remate de larga distancia.
Para la segunda etapa, el entrenador Pinto intentó darle mayor poder ofensivo a su conjunto con el ingreso de Johnny Baldeón en reemplazo del juvenil José Ayoví. Pero, no hubo una respuesta positiva. Tampoco surtió efecto el ingreso de Eddy Ramírez por el paraguayo Domingo Martínez.
Vélez, en cambio, sacó a Escalada y en su reemplazo envió a la cancha al defensa Marcelo Bohórquez. La idea fue darle descanso para que se recupere de una molestia en su aductor. El delantero argentino salió en medio de aplausos de la hinchada.
Esa variante no gustó a todos. La hinchada pedía más goles y no aceptaba un planteamiento defensivo. Pero, con el ingreso de Bohórquez hubo cambios posicionales: Guerrón se convirtió en volante y Méndez, que hasta ese momento (56’) creaba fútbol, subió para acompañar a Ladines.
Cordero pudo marcar el 4-0 a los 64 minutos, pero no cabeceó bien y desaprovechó solo frente al arco. El mismo jugador cuencano remató desde unos 35 metros y Azcona salvó a su conjunto.
Al minuto 66 salió Ladines e ingresó Darwin Caicedo, quien se mostró impreciso en la habilitación y con unas libras demás, incluso se perdió una oportunidad de gol a los 78 minutos.
En el segundo tiempo, el arquero Dreer fue un espectador de lujo ante la ineficacia ofensiva del Independiente, cuyos extranjeros no marcaron la diferencia.
Con el triunfo, Cuenca sumó 10 puntos y sigue entre los líderes.
La figura
Gabriel Méndez es el motor morlaco
El volante argentino fue el coautor de los tres goles que marcó Deportivo Cuenca. De sus cobros de tiro de esquina llegaron los tantos de Narváez y Ladines; mientras que de una jugada colectiva, iniciada por Méndez, terminó en gol de Escalada. En cada partido es el aplaudido.
La contrafigura
Librado Azcona no se salvó de la crítica
El arquero paraguayo se mostró nervioso e inseguro. Nunca ordenó a sus defensas y se quedó constantemente en juego aéreo. Su debut en la Serie A, tras su paso por Liga de Loja, no fue auspicioso en la capital azuaya. Él y sus compatriotas no marcaron la diferencia en la cancha.