Más demanda de vacunas en centros de salud privados

A Iván Baquero le aplicaron la inmunización, ayer, en un centro privado del norte de Quito. Foto: Alfredo Lagla / EL COMERCIO

A Iván Baquero le aplicaron la inmunización, ayer, en un centro privado del norte de Quito. Foto: Alfredo Lagla / EL COMERCIO

A Iván Baquero le aplicaron la inmunización, ayer, en un centro privado del norte de Quito. Foto: Alfredo Lagla / EL COMERCIO

Iván Baquero, de 44 años, está en permanente contacto con decenas de clientes en su oficina. Tramita visas y a diario dialoga con personas con síntomas de gripe. Por eso, ayer, 23 de enero del 2018, decidió vacunarse en un centro privado, como medida de prevención contra la AH1N1.

Es la primera vez que él se inmuniza. “Veo que en otros países las personas contagiadas usan mascarillas, pero aquí no ocurre eso”. Cuenta que al enterarse del brote del tipo de influenza que puede ser letal, quiso protegerse.

Alrededor de 300 personas acuden a diario a Vacunamed, en el norte de Quito. A este centro privado empezaron a llegar más interesados en la vacuna desde la segunda semana de enero, luego de difundirse las cifras de contagiados.

En total, los casos confirmados por alguna variante de influenza suman 497, desde el 19 de noviembre del 2017 hasta el 20 de enero del presente año.

De esa cifra, 441 corresponden a los afectadas por la AH1N1. Además, este tipo de influenza ya ha dejado 22 fallecidos en ese mismo período. El Ministerio de Salud registra una muerte por AH3N2.

A pocos metros de la puerta de ingreso del centro privado, se lee en un cartel: “sí hay la vacuna contra la gripe”. Los usuarios son básicamente personas que no están en el grupo de riesgo, que incluye a niños de hasta 5 años, embarazadas, adultos mayores y enfermos crónicos. Aunque este Diario observó también a ciudadanos mayores de 65 años.

Hay vacunas de dos precios: USD 14,50 y 17,50. La de menor costo contiene tres cepas del virus que provoca la gripe. La segunda opción incluye cuatro cepas: AH1N1, AH3N2 y dos variantes de la influenza tipo B.

Alba de Rodríguez, gerenta general de la firma, sostuvo que la afluencia creció desde que el Ministerio anunció la cifra de fallecidos por AH1N1.

Cuando Virginia Falconí, de 35 años, se enteró de la existencia del brote viral, sobre todo en Pichincha, decidió inmunizarse. Ella acudió con sus tres hijos. Tiene familiares médicos que le recomendaron vacunarse, pero también seguir medidas como lavarse frecuentemente las manos.

Antes de colocarle el antiviral, a Falconí le consultaron si tiene alergia al huevo. Para fabricar las vacunas -le explicaron- los virus atenuados permanecen en un compuesto elaborado a base de la proteína de la clara de huevo, de donde reciben sus nutrientes. Ella contestó que no.

A la pediatra Magalith Montalvo, los padres de niños menores de 5 años le hacen preguntas en relación al brote de gripe estacional. Ella les recomienda que vacunen a sus hijos. “Si no lo hacen en este consultorio, les pido que vayan a los centros de salud”.

En estos días, a través de grupos de WhatsApp, algunos padres hablan de casos de posible contagio de AH1N1 entre los alumnos. Y reclaman por información en los planteles, que deben reportar los casos a los distritos educativos. La sugerencia, insisten los médicos, es inmunizarse.

Belén Carrillo llevó a su hija Dennis, de 10 años, a la consulta de María Augusta Calderón, en el norte. Tenía síntomas de gripe y malestar general. Estaba dispuesta a vacunarla si la pediatra lo recomendaba.

Las lluvias y las bajas temperaturas del inicio del año en varias provincias de la Sierra han incidido en la expansión del brote. Así lo aseguró David Larreátegui, jefe de Infectología del Hospital Carlos Andrade Marín (HCAM).

El galeno recordó que todos los años se registra un brote de diferentes virus que se transportan con el viento y provocan infecciones respiratorias.

Para mitigar el avance de la enfermedad, el Ministerio de Salud lleva adelante la campaña de vacunación contra la influenza AH1N1, AH3N2 y la gripe estacional, para grupos de riesgo. Según Larreátegui, ellos son más vulnerables y pueden morir si contraen el virus, por las complicaciones que se pueden presentar.

Un ejemplo es la neumonía. Por eso protegerlos es prioritario para el Estado.

En Vacunamed, a escala nacional se han distribuido unas 30 000 vacunas contra la influenza. Incluso se llegó a acuerdos con cerca de 50 empresas para inmunizar al personal en su sitio de trabajo.

Verónica Espinosa, ministra de Salud, reiteró que no hay restricciones para que los centros privados ofrezcan las vacunas.
En lo público debemos -dijo- garantizar la inmunización para los más vulnerables. Pidió mantener la calma e informarse por medios oficiales.

En contexto

En 1919 surgió el primer brote de AH1N1, en España. Esto provocó 17 millones de muertos. En el 2009 empezó la pandemia mundial.En Ecuador, en el 2013 se registró el mayor número de pacientes contagiados: 1 259, y 132 muertes. En el 2016 hubo 950 contagios y 83decesos.

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