Según un boletín del 25 de enero del 2017 enviado a importadores, al que este Diario accedió, para este año ya no rigen los cupos para celulares. Foto: Archivo / EL COMERCIO
La eliminación de los cupos a los celulares que rige desde el 2017 llega en momentos en que la demanda está a la baja. Las ventas de celulares cayeron en el 2016 por la contracción económica y el contrabando, según empresarios.
La política de cuotas se estableció en el 2012 y se mantuvo hasta el 2016 cuando se fijó un monto global de USD 250 millones, mediante la Resolución 49. En el 2016, además, los importadores no podían importar más de 2,6 millones de unidades.
La Resolución 49 incluyó la posibilidad de que personas naturales compren hasta un celular al año a través de servicios de mensajería o por arribo internacional de aeropuerto, pasos fronterizos o marítimos.
Según un boletín del 25 de enero del 2017 enviado a importadores, al que este Diario accedió, para este año ya no rigen los cupos para el sector.
Esta información fue confirmada por el exdirector del Servicio Nacional de Aduana del Ecuador, Xavier Cárdenas, quien estuvo en el cargo hasta el miércoles 1 de febrero.
Pese al aumento del cupo en el 2016, la importación de celulares sumó USD 149,8 millones; es decir, un 19% menos respecto al 2015, cuando alcanzó USD 184,2 millones.
En número de unidades, las compras del exterior cayeron en un 39%.
Lo anterior se explica por dos factores, según el director de la Asociación de Empresas de Telecomunicaciones (Asetel), Jorge Cevallos.
El principal es la menor demanda por la contracción económica en el país. Y el segundo es el contrabando, producto de la diferencia de precios respecto a otros países.
Los celulares que ingresan de manera legal pagan cuatro impuestos: 15% de arancel, 0,5% por el Fondo de Desarrollo de la Infancia (Fodinfa), 5% de impuesto a la salida de divisas (ISD) y 14% por el impuesto al valor agregado (IVA). “Mientras más impuestos tiene un producto, más contrabando hay”, explica Cevallos.
Para el directivo, la eliminación de cupos en el 2017 permitirá un mayor acceso a las nuevas tecnologías. Pero cree que debe haber un control más agresivo al contrabando y un mayor fomento a la competencia en el mercado legal.
Erick Ycaza, gerente de la empresa Alcatel en Ecuador, indicó que la liberación del cupo de importaciones a partir de este año fue un acierto, aunque llega en un mal momento para el sector, cuyas ventas están a la baja.
La eliminación de la restricción no significará que se incrementen las ventas, porque los equipos todavía siguen siendo caros debido a los impuestos y aranceles. La proyección de ventas de Alcatel para este año es de USD 4 millones. El negocio ya se vio afectado el año pasado, cuando vendieron USD 7,5 millones, casi la mitad de los USD 14,5 millones alcanzados en el 2015.
La firma tiene como clientes a las operadoras de telefonía móvil Otecel (Movistar), Conecel (Claro) y a la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT).
CNT informó a este Diario, el 6 de enero, que no ocupó todo el cupo de importación del 2016 . Pero en el último
trimestre del año pasado adquirió 1 200 teléfonos para cubrir el ‘stock’ en bodega, lo que representó USD 370 000 en valor en puerto. Las marcas más comercializadas en CNT fueron Samsung, Alcatel, Avvio, LG, Hacer y Huawei.
Gabriel Garcés, presidente de la Asociación de Ensambladores de Electrónicos y Eléctricos del Ecuador (Aeade 2), señaló que la liberación de cupos de importación de celulares afecta al sector de ensamblaje, porque ya no será necesaria la producción local.
Cevallos dijo que solicitarán al Gobierno que se eliminen los aranceles para los celulares, caso contrario el sector no podrá competir frente al producto de contrabando.
El directivo añadió que el sector esperará que terminen las elecciones para delinear estrategias.