La alta radiación solar es una amenaza especialmente para las ciudades de la Sierra por la altitud y la cercanía con la línea equinoccial. Para que la ciudadanía esté informada sobre el nivel de rayos ultravioleta (UV) y tome precaución, el Municipio de Cuenca instaló dos solmáforos.
La capital azuaya al igual que Quito y Riobamba registran niveles de radiación similares, porque están sobre los 2 600 metros de altitud y los rayos solares caen perpendicularmente. No hay un registro que ubique a la urbe con más radiación, pero en la web del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología se detalla el monitoreo de nueve ciudades, entre ellas Guayaquil, Loja, Salinas y Quevedo.
En la semana pasada hubo días que Quito, Cuenca y Riobamba soportaron más 13 unidades UV, de acuerdo con datos del Inamhi. Ese valor representa más del doble del considerado como moderado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que es hasta cinco unidades UV, dijo Pablo Tenesaca, de la Red de Monitoreo Ultravioleta de la Unidad Educativa Rosa de Jesús Cordero de Cuenca.
Según él, por lo general los altos niveles de radiación se producen entre las 10:00 y 14:00 y depende de factores como la altitud, porque los rayos solares llegan directamente. Pero también la contaminación ambiental y la poca densidad de las nubes.
Un solmáforo fue instalado en el parque De la Madre, en el centro-sur de Cuenca. Agencia API para EL COMERCIO
En Cuenca, los reportes de radiación se emiten a diario a través de las redes sociales de la Red de Monitoreo para que el ciudadano tome precaución. A esa alerta se suman desde febrero pasado los solmáforos ubicados en los parques De la Madre y El Paraíso.
Son una suerte de semáforos con cinco luces de colores, que emiten información de acuerdo con la intensidad de la radiación que registra la ciudad cada minuto (ver puntuales). Fueron donados por el Ministerio de Industrias y Productividad y la información es canalizada a través del Consejo de Seguridad.
Según María José Vázquez, directora municipal del Consejo de Salud, se instalaron en esos parques por la afluencia de personas que cruzan por ahí por sus actividades diarias o porque realizan algún deporte o recreación. “No pasan inadvertidos y la gente mira el indicador y lee las sugerencias”.
Al mediodía del viernes pasado, Adriana Barreto, de 26 años, caminaba por el parque De la Madre y le llamó la atención que el solmáforo alertaba que había una radiación extrema de 15 unidades. “Siempre llevo protector solar”, dijo mientras se protegió bajo un árbol y se colocó la crema.
Para ella, este equipo es bastante útil. Barreto aprendió que si el indicador registra sobre las 11 unidades significa que la radiación es muy alta y la Organización Mundial de la Salud recomienda no exponerse al sol más de seis minutos sin protección porque –a la larga- las consecuencias en la salud pueden ser fatales.
La sobreexposición incide en enfermedades como el cáncer de piel, daños a la vista, quemaduras solares, envejecimiento y alteraciones en el sistema inmunológico, principalmente, agregó Vázquez. En la actualidad, el cáncer de piel ocupa el tercer lugar entre las patologías registradas en el Hospital de Solca de Cuenca.
Esa radiación es más nociva aún si se proyecta a las personas a través de vidrios. Es decir, los choferes y sus pasajeros son vulnerables a cualquiera de estas enfermedades. Eso lo desconoce el taxista Edin Elizalde, por eso no se protege.
En los centros educativos, los docentes recomiendan utilizar protector solar durante el día. Y cuando el sol es intenso, las jornadas de cultura física se realizan en espacios cubiertos como coliseos; eso ocurre en el Rosa de Jesús Cordero.
Tenesaca dijo que en Cuenca hay un incremento de carcinomas y melanomas (tipo de cáncer) a la piel, que podrían atribuirse a la radiación. “Por eso estas alertas tempranas ayudan a que los cuencanos tomen conciencia, cuiden su salud y se protejan como recomiendan los especialistas”.
Tenesaca explicó que no es que en los últimos años se haya incrementado de forma importante la radiación solar si no que antes la información no estaba al alcance de los centros de monitoreo y no se difundía como ahora a través de las redes sociales.
Los solmáforos ya están funcionando, pero aún no se inauguran. Vázquez explicó que en los próximos días se lo hará y de forma simultánea empezarán con una campaña informativa para que la ciudadanía conozca la información que proporcionan estos aparatos y las recomendaciones.
Los indicadores de radiación y las precauciones
El color verde claro significa una radiación muy baja. Es decir, se puede permanecer en el exterior sin riesgos.
El verde oscuro también es bajo, entre tres y cinco unidades de radiación. Pero se necesita usar bloqueador y gafas.
El amarillo es un nivel medio, entre seis y siete. Puede tomar sol, pero con precaución usando bloqueador solar.
El tomate es alto (ocho a 10 unidades). Utilice camisa de color claro, protección solar, sombrero, gafas y buscar la sombra.
El rojo es muy alto (11 a 12). Usar prendas para cubrir brazos, protector y no exponerse al sol más de 30 minutos.
El morado es extremo, sobre las 13 unidades. No se recomienda salir a la calle ni estar dentro de un vehículo.