En la avenida Gran Colombia se traza parte del recorrido del tranvía y se ejecutan obras sanitarias. Foto: EL COMERCIO
El avance de la construcción del tranvía de Cuenca suma otra preocupación en las autoridades municipales. En el penúltimo enlace sabatino, el presidente Rafael Correa anunció que no seguirá financiando proyectos de competencias municipales.
Correa dijo que en subvenciones, el Estado entregó USD 720 millones a los municipios.
Y agregó que en ese rubro están proyectos que no les corresponde como el tranvía. Pero días después ratificó que el apoyo continúa. Pese a ello, Esteban Bernal, secretario de Gobierno y Administración del Municipio, dijo que tenía previsto reunirse el fin de semana para analizar el tema. Según él, un recorte provocaría problemas financieros serios al proyecto.
“Vamos a revisar las obligaciones contractuales del Gobierno”.
La construcción del tranvía Cuatro Ríos empezó en noviembre pasado. Cuesta USD 231 millones, de los cuales 126,8 millones corresponden a un crédito del Gobierno de Francia y la diferencia, que representa el 78%, lo asumió el Estado ecuatoriano.
Hay cuatro frentes de trabajo a lo largo de los 21 kilómetros de la ruta (ida y vuelta) que atraviesa por el Centro Histórico. Esta obra la gestionó el exalcalde Paúl Granda, de País, para mejorar la movilidad.
Pero la nueva administración del alcalde Marcelo Cabrera cuestionó los contratos, financiamiento, el trazado de la ruta… Incluso, 15 días antes de su posesión (15 de mayo) pidió a Granda que paralice los trabajos para realizar una revisión.
Eso no procedió porque -según Granda- hay compromisos firmados y eso podría ser causal de multas al Municipio por incumplimiento. En caso de cualquier incumplimiento (suspensión o paralización de la obra) el Municipio podría ser sujeto de fuertes multas económicas por daños y perjuicios.
En las dos primeras semanas de la administración de Cabrera se bajó la intensidad de las obras y más tarde se ratificó que el trabajo no podía paralizarse. Cabrera viajó a París para consultar a la Unesco si el tranvía no afectará el título de Patrimonio Cultural de la Humanidad de la urbe. En las próximas semanas arribará una comisión de la Unesco para hacer una inspección.
Pese a esos reparos, Cabrera insistió que el tranvía tiene un presupuesto financiado, los contratos están honrados y la obra está en ejecución. “Este Municipio no tiene ningún subsidio o situación adicional que genere un ingreso importante para asumir el financiamiento de esta obra”.
Granda coincide con este criterio y dijo que el proyecto tranvía no se vería afectado porque hay convenios firmados entre el Gobierno y el Municipio. El contexto de las declaraciones del presidente Correa es porque el Estado tendrá menos recursos en estos dos años por la ejecución de obras importantes como las hidroeléctricas…
A Bernal le preocupa que el proyecto termine costando más de lo presupuestado por que existen obras que no están contempladas y que el Municipio no disponga de esos recursos. Él mencionó, por ejemplo, el cambio de tuberías hidrosanitarias que están por terminar su vida útil.
Pero Patricia Cordero, exgerenta del proyecto tranvía, dijo que todo fue bien planificado y los contratos fueron blindados para que no se hagan reajustes.
Por ejemplo, dijo que los contratos que están en euros fueron firmados a un precio y cambio fijo de USD 1,30 por euro. “De esta forma protegimos las fluctuaciones que pueden darse en las economías”.
Granda agregó que los contratos de ninguna manera -salvo que exista un tema de fuerza mayor como un fenómeno natural- tendrían que ser sujeto de reajustes. “Eso está en las cláusulas precontractuales entre las partes”.
No se conoce el avance de la obra civil, pero hay cuatro frentes de trabajo en los 21 kilómetros de la ruta (ida y vuelta) desde el Parque Industrial (norte) hasta la entrada a Baños (sur) y el Centro Histórico.