Alrededor de 300 migrantes de nacionalidad cubana duermen en el parque La Carolina en el norte de Quito. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO
Más de 200 cubanos cumplen este martes 28 de junio su décimo día durmiendo en la intemperie y el tercero en el Parque La Carolina, hasta donde se mudaron la madrugada del domingo al ser desalojados de los exteriores de la Embajada de México.
Debido a los daños que dicen haber sufrido esa noche, están buscando caminos legales para demandar por daños y perjuicios y pérdida de bienes materiales.
Las pertenencias que les quitaron durante el desalojo aún no les han devuelto, dice Efraín Sánchez, vocero de esta comunidad. Están pidiendo que se realice un inventario del alimento y los artículos retenidos para asegurarse de que les devuelvan todo. Hoy se reunirán con su abogado.
Los colchones que lograron rescatar los colocaron bajo un techo que encontraron en los alrededores de la pista de patinaje. Sus carpas no las volvieron a instalar, ya que les dijeron que si lo hacían, los sacarían de esta zona, cuenta Sánchez. Por eso, se cobijan con mantas que les han donado y a algunos niños los enviaron a casas de sus amigos para que no se enfermen por el frío. En total 41 menores forman parte del grupo.
En el parque La Carolina, en el norte de Quito, se encuentran ciudadanos cubanos que piden ayuda a la Embajada de México para llegar a Estados Unidos. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO
Desde esta mañana ya cuentan con tres baños portátiles que fueron puestos por el Distrito Metropolitano de Quito. Hoy irán al Municipio para solicitar un permiso para utilizar este espacio público y un dispensador de agua para poder hidratarse.
También quieren un punto con corriente para poder cargar sus celulares. Así podrán avisar y registrar en caso de que se presente un nuevo desalojo. Los cubanos se sienten optimistas con este encuentro, ya que hasta el momento dicen que han tenido el apoyo de la entidad.
Ayer acudieron a la embajada de Estados Unidos y entregaron un documento pidiendo que intercedan por ellos al haber sufrido una vulneración de derechos. También llegaron hasta la Defensoria Pública para pedir una asesoría. La comunidad pide a las personas que se acerquen a donar alimentos, comida para bebé, leche y agua que es lo que más les está haciendo falta.