Un kamikaze se hizo estallar este domingo, 18 de enero, en su vehículo estacionado en una estación de autobús de Potiskum, en el noreste de Nigeria, provocando al menos cuatro muertos y 48 heridos, informaron a la AFP fuentes policiales y hospitalarias.
El atentado no ha sido reivindicado por el momento, pero Potiskum, capital económica del estado de Yobe, ya fue escenario de atentados perpetrados por el grupo islamista Boko Haram.
Según varios testigos, una explosión sacudió la estación de Tashar Kunne, en la periferia de la ciudad, a las 10:30, hora local (4:30 hora de Ecuador), cuando el kamikaze se precipitó con su vehículo contra los autobuses estacionados en los que en ese momento montaban pasajeros.
“Vi al kamikaze disminuir la velocidad dos veces antes de acelerar de repente y empotrar el coche contra los autobuses aparcados a la espera de pasajeros”, declaró a la AFP Umar Sani, comerciante de uno de los puestos situados en las inmediaciones de la estación.
El fin de semana anterior, un doble atentado suicida mató a cuatro personas en la misma ciudad.
El pasado sábado 10 de enero al menos 20 personas murieron al estallar una bomba adosada a una niña de unos 10 años en un mercado muy concurrido de la ciudad de Maiduguri, en el nordeste de Nigeria.
“Hay muchas víctimas: 20 muertos y 18 heridos, incluyendo la mujer kamikaze que se hizo estallar”, declaró a la prensa Gideon Jubrin, el vocero policial del estado de Borno.
Ashiru Mustafa, miembro de un grupo local de autodefensa, explicó que la bomba explotó mientras alguien cacheaba a la niña a la entrada del mercado. Según él, no se trata de un acto deliberado de la niña. “La niña tenía unos 10 años y dudo seriamente de que supiera lo que tenía adherido al cuerpo”, dijo a la AFP
Potiskum ha sufrido numerosos ataques de Boko Haram. En noviembre de 2014, un atentado mató a 14 personas en una procesión chiita, y una semana después, un kamikaze se inmoló en un instituto matando a 58 personas e hiriendo a un centenar.