El presidente Rafael Correa agradeció a las personas que le saludaron, por su cumpleaños, en Pifo. Foto: Vicente Costales/ EL COMERCIO
El presidente Rafael Correa salió del almuerzo popular, en una edificación junto al parque central de Pifo, en medio de música de cumpleaños infantil. La voz de Topo Gigio con un mariachi interpretando Las mañanitas sonaba mientras un grupo de unas 30 personas esperaba afuera para saludar al Mandatario la tarde de este martes 5 de abril del 2016.
Luego, cuando policías, militares y agentes municipales de tránsito se comunicaban por radio para preparar el traslado de Correa, la música se puso más animada: “rómpela, rompe la piñata, rómpela… que la rompa Pepito, sííííííí…” sonaba, mientras los niños bailaban.
La canción fue interrumpida abruptamente para que finalmente llegaran las notas de Patria, tierra sagrada, ese himno que años atrás se escuchaba un par de veces cada año lectivo en los colegios y escuelas o en alguna parada militar, pero que ahora se repite constantemente cada vez que el Presidente está por entrar o salir de algún lugar.
El Mandatario salió en medio de abrazos y felicitaciones. Durante todo el día, en Pifo, parroquia rural del Distrito Metropolitano de Quito, las inauguraciones de obras estuvieron mezcladas con saludos de cumpleaños para Correa, quien mañana cumplirá 53 años.
La última actividad prevista se llevaría a cabo en la Dirección Distrital de Educación. Al preguntar a los uniformados cuál era la dirección del lugar, uno de ellos respondió: es en la calle Rafael Correa y avenida Interoceánica“. Al llegar a la calle, es fácil reconocer el error. La calle, en realidad, se llama Rafael Delgado pero esta jornada todo rondó alrededor del Mandatario.
Entre el parque central de Pifo y la Dirección Distrital de Educación hay alrededor de cuatro cuadras. Pero conforme se acercaba al lugar, había más uniformados mirando quién venía, evitando que los vehículos se estacionaran en el trayecto y verificando que no entrara más gente de la indicada. Allí se realizaría un conversatorio con medios de comunicación.
El Mandatario en la inauguración de la vía Colibrí-Pifo-Santa Rosa de Cusubamba. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO
La modalidad es la misma que años atrás: los periodistas deben inscribir sus preguntas la víspera o hasta primeras horas del día y el personal de la Secretaría de Comunicación decide cuáles se harán y cuáles no.
El Mandatario ingresó a la sala e hizo lo acostumbrado antes de abrir el espacio de preguntas: un recuento de actividades del día. Pero esta vez fue especial, porque también dedicó un tiempo a agradecer los saludos de cumpleaños durante la jornada y a recordar que el día anterior tuvo un almuerzo con tuiteros que hicieron públicos videos de ‘la sobremesa’.
Eran imágenes del Presidente cantando con los jóvenes temas como Mariposa tecnicolor, de Fito Páez y Color esperanza de Diego Torres, ambos argentinos. La Guitarra, de los Auténticos Decadentes, también de Argentina, fue la más retuiteada y criticada en redes.
Correa se burló de las críticas y agradeció a los jóvenes que le acompañaron y no reclamó que hayan difundido los videos pese a que hace unas semanas se había prohibido esa práctica entre los invitados a los almuerzos de los lunes y días especiales en Carondelet.
Las preguntas fueron en torno a lo previsible: reforma tributaria, Panamá Papers y los próximos viajes de Correa a Estados Unidos y a él Vaticano.
El Presidente ya había tocado algunos de esos temas durante la inauguración de un proyecto hidroeléctrico y una carretera horas antes. Pero esta vez, a las preguntas de los periodistas de medios públicos antecedieron frases como: “Que tenga un feliz cumpleaños, señor Presidente” o “¿Qué tal estuvieron los pasteles, señor Presidente?”.
Tras una hora, el Mandatario se despidió de los periodistas y salió del lugar. Su equipo de comunicación anunció que mañana la jornada será de “actividades privadas”. Así, Correa podrá celebrar su cumpleaños a su manera.