Redacción Política
La política de comunicación sigue siendo una prioridad para el Gobierno. En esa perspectiva, la Presidencia de la República tomó dos medidas que apuntan a optimizar el área de comunicación, difusión e información de las actividades del Régimen, así como el manejo de los medios públicos.
La primera decisión fue la reestructuración de la Secretaría Nacional de Comunicación de la Presidencia de la República. Mediante Acuerdo nro. 18, el secretario nacional de Comunicación, Fernando Alvarado, aprobó una nueva estructura administrativa para esa dependencia.
5,8 millones
destinó la Presidencia de la República para las actividades de difusión durante 2009.
Ello implicó la creación de 25 cargos burocráticos, divididos en tres subsecretarías, una instancia de coordinación general y planificación y tres asesorías de nivel jerárquico superior.
A la Subsecretaría de Información, que tradicionalmente ha tenido Carondelet, se sumaron la de Comunicación Política y la de Innovación y Desarrollo de Nuevos Medios. “Con esta nueva estructura buscamos mayor eficiencia en nuestros procesos, como cualquier entidad sea pública o privada”, manifestó el secretario Fernando Alvarado, en entrevista con este Diario.
Según Alvarado, con esta nueva estructura se ejecutarán las atribuciones establecidas para esta dependencia gubernamental en el Decreto Ejecutivo 1 795, del pasado 22 de junio.
La Subsecretaría de Comunicación está dirigida por Patricio Barriga. Tiene a su cargo la definición de estrategias para mejorar la comunicación entre gobernantes y gobernados. Asesora las actividades comunicacionales.
Mientras tanto, la subsecretaria de Información, Carolina Espinosa, tiene entre sus funciones la organización de los enlaces sabatinos del presidente Rafael Correa y las cadenas nacionales que difunde la Secretaría Nacional de Comunicación.
En estos enlaces se difunden las actividades del Gobierno Nacional, pero también son espacios en los que el Régimen expone sus puntos de vista en los temas que son de interés en la coyuntura.
La tercera Subsecretaría es la de Innovación y Desarrollo de Nuevos Medios. Tiene a su cargo el desarrollo de los medios de difusión que ahora posee el Palacio de Carondelet. Su responsable es Marco Antonio Bravo.
Entre estos medios está el periódico quincenal El Ciudadano, El Ciudadano on line, la Cabina de Carondelet (un programa de entrevistas a funcionarios del Gobierno que se difunde por Radio Pública) y la nueva agencia estatal Andes, en sus contenidos predominan la agenda oficial.
Aparte de esta estructura, también hay otro personal que trabaja para el área de Comunicación de la Presidencia de la República. Se trata del equipo del departamento de Síntesis y Monitoreo (en Quito y Guayaquil), de televisión y prensa externa. En total suman 56 funcionarios, los que trabajan para informar las actividades gubernamentales.
La creación de la Empresa Pública de Radio y Televisión del Ecuador fue la segunda medida adoptada por el Régimen. El pasado 29 de diciembre, se expidió un decreto ejecutivo para oficializar la creación de esta empresa pública, que tendrá como finalidad operar y mantener los servicios de la radio y televisión públicos que operan en el país.
El directorio de esta nueva empresa estatal estará compuesto por el ministro de Telecomunicaciones, Jorge Glas o su delegado; el secretario nacional Planificación y Desarrollo (Senplades), René Ramírez, o su delegado; y el secretario de Comunicación, Fernando Alvarado, en calidad de representante del Presidente de la República.
Hasta ayer, no se reunía el directorio de la nueva empresa, que tendrá un capital inicial de 3,3 millones de dólares, correspondiente a los activos que poseen Ecuador TV y Radio Pública.
En una entrevista con este Diario, Mauricio Rodas, director de la Fundación Ethos, comentó que detrás de toda esta estructura está toda la política de bombardear al televidente y lector con propaganda oficial. Rodas considera que hay una exagerada exposición mediática del presidente Correa y de sus funcionarios.