El espacio servirá para recibir las cerca de 2 000 toneladas diarias de residuos que se generan en Quito y en el cantón Rumiñahui. Foto: cortesía Municipio
En septiembre del 2018, Quito contará con un nuevo espacio para disposición final de los desechos sólidos urbanos. A inicios de enero se inició la construcción del cubeto 9B, un espacio configurado técnicamente en el Relleno Sanitario de El Inga donde se da tratamiento a la basura que genera la ciudad.
Según la Empresa Pública Metropolitana de Gestión Integral de Residuos Sólidos (Emgirs) la obra requerirá una inversión de USD 8,23 millones, de los cuales USD 4,98 millones son financiados por el Banco de Desarrollo del Ecuador.
Construir este nuevo espacio tomará siete meses y servirá para recibir las cerca de 2 000 toneladas diarias de residuos que se generan en todo el Distrito Metropolitano de Quito y en el Cantón Rumiñahui.
El cubeto contará con un volumen de 1 450 000 metros cúbicos y con una superficie de 4,7 hectáreas, lo que servirá para prolongar la vida útil del relleno sanitario por 2 años y un mes más.
Este tipo de espacios cuentan con un sistema de drenajes elaborados con materiales de larga duración y un sistema para captación de biogás y del líquido que genera la basura en descomposición conocido como lixiviado. Esto con la finalidad de garantizar una operación adecuada.
También cuentan con un recubrimiento con material geosintético, lo que asegura que el cubeto no tenga filtraciones para evitar cualquier impacto ambiental en el suelo.
La Emgirs hace un llamado a la gente para que adopte nuevas prácticas de reciclaje en casa, ya que así se optimiza la vida útil del relleno sanitario. Por esa razón, el Municipio impulsará este año la campaña Quito a Reciclar con el objetivo de implementar acciones junto con la comunidad para que se reduzca la cantidad de basura que se genera en la ciudad.