Guillermo Lasso presentó en Quito a los nuevos integrantes de Compromiso. Foto: API
La plataforma Compromiso Ecuador mutó. Se creó en 2014 como un movimiento ciudadano que se oponía a las enmiendas constitucionales y que buscaba una consulta popular sobre la reelección indefinida.
Ahora, 10 meses después, sus dirigentes se enfocan en sumar respaldos para la candidatura presidencial del líder de Creo, Guillermo Lasso.
Ayer, en Quito, él presentó a sus nuevos adherentes. Hubo rostros conocidos de la política como Fanny Campos, excoordinadora Nacional de Pachakutik.
En abril pasado, ella perdió en las elecciones internas del movimiento en las que esperaba ser reelecta. Dejó el cargo en manos de Marlon Santi y ahora se sumó a Auki Tituaña, que también dejó el movimiento del arco iris para impulsar la candidatura de Lasso.
También se vio ayer en Quito a Enrique Herrería, exasambleísta por PSC/Madera de Guerrero; Armando Manobanda, concejal de Buena Fe por Alianza País; Jacinto Aguirre Varas, concejal de Baba por Suma, entre otros. En total, según la plataforma, hay 130 actores políticos en esa alianza.
Lasso comenzó a hablar de un giro en el colectivo Compromiso Ecuador en mayo del 2015. Entonces ya advirtió que podría existir un acuerdo de cara a las elecciones de febrero del 2017. Luego hubo un relanzamiento y la plataforma anunció que la organización trabajaría para buscar alternativas ante la crisis económica y el desempleo.
Según César Monge, director nacional de Creo, Compromiso Ecuador fue mutando de acuerdo con las coyunturas que vivió el país. En enero de este año, cuando estuvieron por dar fin al colectivo, sus 49 integrantes decidieron que no era momento para desaparecer, sino para reforzarlo, precisamente por los comicios.
César Monge niega que desde un principio la intención haya sido impulsar la candidatura de Lasso aprovechando el descontento que generaron las enmiendas. Para él, el líder de Creo se convirtió en el camino en una alternativa para “cambiar el modelo del correísmo”.
Tras esa decisión, el Movimiento Concertación, del exconstituyente César Montúfar, se alejó en febrero pasado del compromiso y ahora es parte de la Unidad. Es la otra opción de centro derecha que se ha mostrado en la etapa preelectoral.
Para la exlegisladora de AP, Betty Amores, quien es parte de Compromiso desde mayo del año pasado, el espacio ha permitido la convergencia ciudadana. “Yo no creo que el tema electoral sea un punto negativo, creo que el mecanismo más claro de participación de la ciudadanía va a ser justamente el tema electoral y Compromiso está en esa coyuntura”, afirmó.
Pero ¿por qué no se sumaron a Creo quienes impulsan la candidatura de Lasso? Monge responde que el movimiento y Compromiso son dos espacios diferentes.
Creo tiene un tinte más partidista; el colectivo, en cambio, permite la participación de movimientos y personalidades políticas bajo su propio espacio e ideología. Así, Creo ha ido sumando también a expartidarios de organizaciones políticas tradicionales: Fausto Cobos (ex PSP), Andrés Pavón, Vicente Taiano y Shirley Borja (ex Prian), Fernando Romero y Macarena Valarezo (ex PSC), Fernando Callejas (ex AP), entre otros.
Vicente Taiano no cree que la participación de exmilitantes de otras organizaciones obedezca a un ‘camisetazo’.“No estamos yendo de un partido político a otro, estamos en Compromiso que es un colectivo que nos permite aportar desde nuestros puntos de vista. No nos hemos afiliado a un partido político, por eso no somos de Creo”, dijo.
El conglomerado que respalda la candidatura de Lasso también lo conforman, entre otros, el activista político Fernando Villavicencio, el excoronel de Policía César Carrión, el analista económico Pablo Lucio Paredes y el dirigente de Pachakutik Milton Castillo.
Taiano considera que cada uno, desde su trinchera, aporta con su capital político con la finalidad de sumar votos a la candidatura de Lasso.
En contexto
En la centro derecha se han mostrado, hasta ahora, dos opciones electorales. Guillermo Lasso, de Creo, y Cynthia Viteri, de La Unidad. Ambas organizaciones han descartado, por ahora, un acercamiento.