En el centro comercial El Recreo hay control de bioseguridad en el ingreso, y letreros con mensajes preventivos en el interior. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
El chat fue creado para reforzar el control en los centros comerciales durante la semana de descuentos de Black Friday y festividades de diciembre.
Tiene 34 participantes, entre quienes están los administradores de 12 establecimientos, la Agencia Metropolitana de Control (AMC), los Bomberos y la Agencia Metropolitana de Tránsito. La foto de perfil es la imagen de un grupo de personas uniendo sus manos.
Es la primera vez que el trabajo de los distintos actores del comercio se articula de esa manera. El chat forma parte del pacto al que llegaron las autoridades y los representantes de centros comerciales, para evitar la propagación del virus en las compras navideñas.
Los administradores de los centros firmaron un acuerdo en el que se comprometieron a cumplir al menos ocho requisitos, entre ellos hacer campañas para que los visitantes tomen conciencia del uso de mascarilla, eviten aglomeraciones y mantengan la distancia de 2 metros.
Asimismo, a usar megáfonos y proyectar en pantallas la información que el Municipio les enviará sobre prevención.
Además, deben corregir la señalética interior y tienen que generar un documento de descargo en los patios de comida, para que las familias puedan compartir una mesa.
Otro de los compromisos es reforzar el control en los ingresos, para lo cual se utilizarán ayudas tecnológicas.
De igual forma, realizar un estricto control del aforo (50%) y tener un protocolo para saber cómo reaccionar en caso de detectar un posible positivo entre los visitantes.
El vicealcalde Santiago Guarderas indicó que se trata de un acuerdo que debe respetarse, caso contrario llegarán a las últimas consecuencias, lo que puede significar el cierre de centros comerciales.
El fin de semana pasado, en un establecimiento del valle, la gente se amontonaba en los almacenes sin respetar el aforo.
En otro comercio del norte, las personas utilizan las gradas eléctricas sin mantener distancias. Acudieron adultos mayores, personas en sillas de ruedas, madres con bebés en brazo y niños sin mascarilla.
Justamente, para evitar que se den ese tipo de escenas, en Ciudad Comercial El Recreo se tomaron varias medidas.
Marianela Berrazueta, administradora general del lugar, indica que instalaron contadores electrónicos en 13 puertas para tener un registro exacto de cuántas personas entran y salen, y cuántas se encuentran simultáneamente en el lugar.
En el centro comercial Ipiales del Sur se controla la temperatura. Además, el uso de mascarilla es obligatorio. Foto: EL COMERCIO
El lugar tiene capacidad para 40 000 personas, pero debido al aforo reducido, pueden entrar máximo 18 000. Cuenta con cámaras de seguridad y cuando se advierten tumultos, alguien del personal que se encuentra vigilando los pasillos acude para dispersar a la gente.Los patios de comidas tenían 1 500 asientos; ahora, solo 600.
Berrazueta explica que desde esta semana se reforzaron las campañas de sensibilización. Además, desde mañana se ampliarán los horarios de atención, de 09:00 a 21:00.
María del Carmen Garzón, gerenta de operaciones de DK Management (grupo que administra ocho centros comerciales), considera que la creación del chat es fundamental.
Lo usan, por ejemplo, para compartir conocimientos, despejar dudas, hacer consultas técnicas y alertar a la autoridad sobre posibles problemas.
Ayer 24 de noviembre, por ejemplo, Bomberos informó por esa vía que les visitarían para revisar las fórmulas de cálculos de aforos.
Las medidas son similares en todos los negocios. Al ingreso del Quicentro Shopping se hacen todos los controles de rigor. El piso está señalizado y hay lavamanos adicionales. Además, las figuras navideñas se desinfectan cada noche. Lo mismo ocurre en El Portal.
En estos establecimientos se contrató personal adicional para que ayude a controlar.
Garzón asegura que la inversión económica (tanto la inicial en infraestructura, como la de gastos diarios) garantiza seguridad al comprador.
Por su lado, representantes de 10 centros comerciales del ahorro aseguran que cumplen con las normas y pidieron apoyo a la autoridad municipal.
Estefanía Grunauer, supervisora de la AMC, señaló que los operativos se reforzarán, e hizo un llamado a la gente para que en caso de ver incumplimientos los denuncien.